ARÁOZ ALFARO, Rodolfo (San Miguel de Tucumán, Pcia. de Tucumán, 18/11/1901 – El Totoral, Pcia. de Córdoba, 3/11/1968).
Militante reformista, abogado socialista, luego comunista, defensor de presos gremiales y políticos, durante muchos años apoderado legal del Partido Comunista argentino.
Procedente de una familia oligárquica tucumano-porteña, es hijo de Gregorio Aráoz Alfaro, destacado médico semiólogo y profesor universitario y de María Celina Maturana. Tuvo dos hermanas: Susana y Celina.
Cursa estudios primarios en la Escuela Presidente Roca y secundarios en el Colegio Nacional de Buenos Aires, donde en 1918 es uno de los promotores de una huelga estudiantil en apoyo a la Reforma Universitaria. Pertenece, junto a Deodoro Roca, Gregorio Bermann y Saúl Taborda, a la generación de los reformistas. Pasa luego a la Facultad de Derecho (UBA), donde tiene activa militancia estudiantil junto a Carlos Sánchez Viamonte, Julio V. González y los hermanos Arturo y Silvio Frondizi. Llega a ser secretario del Centro de Estudiantes y más tarde de la Federación Universitaria Argentina, participando en enfrentamientos con los grupos de estudiantes nacionalistas.
Tras el golpe militar de septiembre de 1930, ingresa como Jefe de la asesoría jurídica al Departamento Nacional de Trabajo (cuyo secretario es su amigo Faustino Jorge). Si bien impulsa el cumplimiento de leyes laborales que hasta entonces las patronales no acataban, el hecho de aceptar un nombramiento bajo la dictadura del Gral. José F. Uriburu hizo que un abogado radical lo retase a duelo.
En 1932 se afilia al Partido Socialista, tal como lo habían hecho otros jóvenes de la generación reformista como Sánchez Viamonte y Julio V. González. Colabora en su órgano, La Vanguardia. En 1930 había sido uno de los editores de la revista socialista Polémica (1930-31) y tres años después colabora en el periódico Cauce. Tribuna de la izquierda socialista (1933-34), que dirige Ernesto Giúdici. En el PS se vincula estrechamente a Mario Bravo, llegando a ser una suerte de secretario del senador socialista.
Poco después lidera, junto a Benito Marianetti, Ernesto Giúdici y Faustino Jorge, el “ala izquierda” partidaria. En el XXII Congreso del PS, celebrado en Santa Fe en mayo de 1934, el ala izquierda postula afirmar la condición de partido de clase e internacionalista, rechaza los acuerdos con los partidos burgueses y promueve el frente único con el PC. Dicha ala alcanza una representación minoritaria en el congreso y ante la persistencia de su oposición, la dirección resuelve la disidencia por medio de expulsiones e intervenciones y disolución de centros. Gran parte de dicha ala se escisiona para constituir, en mayo de 1937, el Partido Socialista Obrero (PSO), del que Aráoz Alfaro llega a ser prosecretario y director de su órgano Avance. El PSO, agitado por divergencias internas inconciliables, tendrá una vida efímera. En el congreso partidario celebrado en octubre de 1938 se expulsa al ala trotskista que lidera Enrique Broquen y termina por imponerse el ala procomunista que lideran Aráoz Alfaro y Marianetti. Por entonces, colabora estrechamente con los frentes de masas que hegemonizan los comunistas, como miembro del Grupo de Ayudistas Jurídicos del Socorro Rojo Internacional y luego como abogado de la Liga Argentina por los Derechos del Hombre (LADH). Ingresa oficialmente al PC, junto a Benito Marianetti, hacia 1942, cuando disuelven legalmente el PSO.
Ferviente opositor al régimen nacido con el golpe militar de junio de 1943 y luego del peronismo, sufrirá cárceles reiteradamente. Como defensor del dirigente paraguayo Obdulio Barthe, viaja a Asunción junto a Sánchez Viamonte y el diputado radical Raúl Uranga, pero son inmediatamente expulsados. En 1944 presenta un informe oral ante la Cámara del Crimen por las torturas infligidas a un dirigente obrero. Poco después es detenido por la Sección Especial y conducido a la cárcel de Villa Devoto. Cuando junto con sus camaradas presos realiza un acto, el 25/8/1944, por la Liberación de Paris, es trasladado a una celda de castigo y luego al presidio de la Isla Martín García. En 1945 es dejado en libertad con la obligación de salir del país. Se instala varios meses en Montevideo, desde donde colabora en el periódico Pueblo Argentino (Montevideo, 1943-45), que dirige Rodolfo Ghioldi y participa como locutor de un programa radial sobre la situación argentina. Es orador de un acto realizado en Montevideo de homenaje a la España Republicana con una intervención sobre las Brigadas Internacionales.
De retorno en Buenos Aires, se enrola activamente, junto a su partido, en la Unión Democrática. Participa (16/8/1945) de una concentración en la Plaza San Martín donde los manifestantes reclaman la renuncia del gobierno militar, porduciéndose un tiroteo. Participa también de la Marcha de la Constitución y de la Libertad por las calles de Buenos Aires (19/10/1945). Forma parte del Círculo de Amigos del diario comunista La Hora, que comienza a publicarse el 10/11/1945. En las elecciones de febrero de 1946 en que triunfa la fórmula encabezada por el Cnel. Juan D. Perón, es candidato a diputado nacional por la Unión Democrática. Se desempeña desde entonces como apoderado legal del PC. Es durante muchos años miembro de su Comité Central. En diciembre de 1948 es candidato a convencional constituyente. Es vocal de la comisión electoral del PC de la Capital y miembro de la Comisión encargada de las reformas constitucionales.
En 1949 viaja a Roma para asistir al IVº Congreso de la Asociación Internacional de Juristas Democráticos. Vuelve a ser repetidas veces candidato a diputado nacional (1951, 1954, 1958) y a convencional constituyente (1957). En 1954 es nuevamente detenido en la cárcel de Villa Devoto. El 16 de junio de 1955 atraviesa casualmente la Plaza de Mayo cuando aviones de la Fuerza Aérea bombardean la Casa Rosada. En abril de 1957 es detenido, en el marco de la llamada “Operación Cardenal”, junto a otros dirigentes comunistas como Rodolfo y Orestes Ghioldi, Emilio Troise, el escritor y dramaturgo Leónidas Barletta y el director de tango Osvaldo Pugliese, siendo trasladado a un barco que funcionaba como “cárcel flotante”.
En el marco de su actividad como apoderado partidario y defensor de presos políticos, tiene varias entrevistas en 1957 con el candidato de la Unión Cívica Radical Intransigente (UCRI) Arturo Frondizi.
En enero de 1959, en contexto de la huelga y toma del Frigorífico Lisandro de la Torre, es arrestado en su quinta de El Totoral, Pcia. de Córdoba, trasladado a Buenos Aires y detenido en un barco de la Armada. En setiembre de ese mismo año es invitado a la República Popular China para participar en el 10° aniversario de la Revolución, pero es arrestado por orden del Poder Ejecutivo cuando subía al avión. Es detenido en la cárcel de Caseros. Viaja finalmente a China en 1960. Vinculado a la fracción pro-china que rompe con el PC a fines de 1967, Aráoz Alfaro permanece sin embargo dentro de las filas partidarias, aunque alejado desde entonces de la militancia activa.
La vieja casona familiar de la Av. Santa Fe, así como su casa de campo en El Totoral, Pcia. de Córdoba, fue refugio de paz así como tertulia habitual de intelectuales y artistas, por donde pasaron figuras como David Álfaro Siqueiros, Tristán Marof, Deodoro Roca, Raúl Gonzalez Tuñón, Faustino Jorge y su esposa Sara Maglione, Mario Bravo, Rodolfo Ghioldi, Jorge Cafrune, Armando Tejada Gómez, Mercedes Sosa, “Policho” Córdova Iturburu con su esposa Carmen de la Serna y su joven sobrino: Ernesto Guevara Lynch, que años después sería El Che. En El Totoral el chileno José Donoso escribió su libro Charleston y Pablo Neruda compuso muchas de sus Odas elementales. Fue el primer refugio argentino de María Teresa León y Rafael Alberti, donde vivieron entre 1940 y 1942, nació su hija Aitana y el poeta concluyó su libro El clavel y la espada.
Casado en primeras nupcias con la artista plástica María Carmen Portela, desde 1945 y durante un breve período mantuvo un vínculo sentimental con Amelia Lamazou, la secretaria de su estudio jurídico de la calle Cangallo 466. A través de Neruda conoció a su tercera mujer, entonces secretaria del poeta: la escritora chilena Margarita Aguirre, que en 1954 se instala en Buenos Aires. Tuvieron dos hijos: Gregorio y Susana.
Gravemente enfermo, a mediados de la década de 1960 se instala en El Totoral, donde escribe sus memorias: El recuerdo y las cárceles (1967). Sus restos descansan en el cementerio del pueblo.
Amigos y enemigos definieron a Rodolfo Aráoz Alfaro como un “comunista aristocrático”. Según el testimonio de su camarada Marianetti: “Mucamos ceremoniosos nos servían café con guantes blancos en finas tazas de porcelana de Limoges mientras nosotros hablábamos de la Revolución”.
Obra
- “¡Justicia..! ¡Libertad..! Defensa de los Dres. Corona Martínez, F. Jorge, S. Shmerkin, R. A. Alfaro y S. Sheimberg”, Buenos Aires, FORA, 1936.
- “Por la legalidad de los partidos políticos”, Buenos Aires, Anteo, 1957.
- El recuerdo y las cárceles (Memorias amables), Buenos Aires, De la flor, 1967.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2019), “Aráoz Alfaro, Rodolfo”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org