DAGNINO, Esteban

Nacido en el seno de una familia de republicanos italianos, llegó a la Argentina en 1888, integrándose rápidamente a los primeros grupos obreros y socialistas de Buenos Aires. 

Es miembro de la agrupación idiomática italiana Fascio dei Lavoratori, fundada en Buenos Aires el 8 de abril de 1894 y que un año después convergirá con otros grupos para constituir el primer Comité Central del Partido Socialista Obrero Internacional. Colabora en su órgano, La Rivendicazione. Giornale Socialista Settimanale (Buenos Aires, 1896) con su nombre italiano Stefano Dagnino (“Il socialismo nell’Argentina”, en: La Rivendicazione nº 3, Buenos Aires, 17/10/1896). También colabora en La Vanguardia desde su fundación en 1894.

Se afilió al Partido Socialista el 1° de enero de 1896, naturalizándose ciudadano argentino ese mismo año. Colabora con su nombre italiano Stefano Dagnino en el único número del periódico L’Emigrato (Buenos Aires, 14/5/1899), que lanzó el Círcolo Socialista Italiano, como se denominó el grupo de migrantes italianos del Fascio del Laboratori una vez que se integra al PS. Sin embargo, cuando el socialista italiano Stanislao Rossi publica en La Vanguardia un artículo un artículo justificando la creación de asociación en lengua italiana para hacer propaganda socialista entre los miembros de esa comunidad, Dagnino responde desde las mismas páginas que las asociaciones idiomática representaban “un atraso lamentable” para el Partido. El debate continuó con la participación de numeros miembros del Fascio y del Circolo.

Había trabajado como fotógrafo en su Italia natal. En Buenos Aires, instaló con su hermano Francisco Dagnino, la Galería-Estudio de Fotografía “Dagnino Hermanos”, sita en Independencia 1808 y luego en Entre Ríos 633, donde habitualmente se retrataban los dirigentes socialistas así como los visitantes ilustres, como el socialista francés Jean Jaurès cuando arribó a Buenos Aires. Suele anunciar en la última página de La Vanguardia con el siguiente texto: “Fotografía Dagnino Hnos. Retratos inalterables y de última novedad. Especialidad en bromuro, óleos y lápiz. Precios sin competencia. Independencia 1808, casi esquina Entre Ríos” (La Vanguardia, 1897, p. 4, repite en El Diario del Pueblo, 1899, p. 4).

Fue elegido colaborador de La Vanguardia por voto general de afiliados escrutado el 20 de noviembre de 1899, y luego, en 1913, fue nombrado redactor, cargo que desempeñó hasta su muerte. 

Fue delegado por el Centro Socialista de Cnel. Suárez a la

primera reunión del Consejo Nacional del Partido que tuvo lugar el 15 de septiembre de 1900. Representó al Centro Socialista de Baradero en el Quinto Congreso del PS del 8 y 9 de julio de 1903.Fue miembro suplente del Comité Ejecutivo del partido que se eligió luego del Sexto Congreso de 1904. 

Colaboró regularmente en El Diario del Pueblo (Buenos Aires, 1899) que dirigió Juan B. Justo, el Almanaque Socialista de La Vanguardia (Buenos Aires, 1899-1909) y años después en el Anuario Socialista (Buenos Aires, 1928-1951). Así, en la nota “El arte de mañana” (Almanaque socialista de “La Vanguardia” para 1904, Buenos Aires, 1903, p. 13), postula un arte que, alejado del esteticismo, se anude al avance del progreso y la ciencia; o en “Barbarie moderna” (Almanaque socialista de “La Vanguardia” para 1905, Buenos Aires, 1904, p. 44-45) señala la superstición religiosa y el caudillismo político como elementos de atraso, que la “cruzada” de los socialistas, con sus libros, folletos y diarios, debía extirpar al arar los “campos vírgenes” de las mentes aún no esclarecidas, para así eliminar la “barbarie”.

En el marco del debate que se instala al interior del PS con la corriente sindicalista, lanza con su hermano Francisco en enero de 1906, en respuesta a esta corriente, Vida Nueva. Revista socialista. Política, Economía, Arte, Literatura  (Buenos Aires, 1906-1907).  Allí colaboraron algunas de las principales firmas del socialismo de esos tiempos, como Juan B. Justo, Manuel Ugarte, Luis N. Grüner y los propios hermanos Dagnino, así como algunas figuras extrapartidarias como Lucas Ayarragaray, Ricardo Rojas, Francisco Villaespesa, Ernesto Mario Barreda, Juan José de Soiza Reilly y Adolfo D. Holmerg.

Rechazó casi siempre las candidaturas, prefiriendo el rol más anónimo del periodista, aunque después de la crisis partidaria y la división de 1927 (la ruptura del Partido Socialista Independiente, PSI), aceptó figurar como candidato a diputado nacional y a concejal. 

Fue miembro de comisiones y bibliotecas de diversos centros. En 1918 y 1919 integra el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PS como vocal y como vocal suplente, respectivamente. Fue vocal de la Federación Socialista de la Capital. Está entre los primeros socios de “El Hogar Obrero”, cooperativa limitada de crédito y edificación fundada el 30 de julio de 1907.

Los últimos años de su vida fue un fervoroso crítico del fascismo italiano.