SUERO DE BALDOVINO, Cecilia (Buenos Aires, Argentina, 9/12/1865 – Buenos Aires, Argentina, sin más datos de nacimiento o fallecimiento).
Militante del Partido Socialista (PS) argentino, de la Unión Gremial Femenina (UGF) y de la Unión General de Trabajadores (UGT).
Hija de Juan Suero y de Raimunda Álvara. En el año 1882 es menor de edad (16 años) cuando inicia un noviazgo con Lucio Baldovino, obrero tipógrafo de 24 años. Su padre se opone a la relación con un curioso argumento que sentó jurisprudencia y alcanzó resonancia pública cuando fue recogido por el popular folletinista Eduardo Gutiérrez en su relato Una demanda curiosa (1899): la relación no podía consumarse porque su hija Cecilia era medio hermana de Lucio Baldovino. Según Juan Suero, Baldovino era hijo del primer marido de su esposa, doña Raimunda. Cecilia y Baldovino entendieron que se trataba de un excusa para impedir la relación y se marcharon juntos, pero Suero denunció la partida de su hija como el rapto de una menor e inició una demanda judicial. Cecilia se negó a regresar por la fuerza a la casa paterna alegando malos tratos y mientras se resolviera su caso fue derivada por el juez de menores a un convento de monjas, la Santa Casa de Ejercicios Espirituales “San Ignacio de Loyola”. Lucio Baldovino, finalmente, logró probar ante el juez que no era hijo de Raimunda Álvara y consiguió la aprobación de la justicia para concretar su casamiento con Cecilia Suero. Firma desde entonces como “Cecilia S. de Baldovino”.
Ambos aparecen a fines del siglo XIX en las jornadas fundacionales del socialismo argentino. Cecilia fue oradora en el acto celebrado en la Plaza Rodríguez Peña de la ciudad de Buenos Aires el 1º de Mayo de 1899 con un discurso en que sostenía el reclamo de las mujeres por obtener “los mismos derechos que para el hombre en el terreno político, jurídico, moral y social”, exhortando a las mismas a “cooperar a este gran movimiento social que se está produciendo en todo el mundo civilizado y que preparará el advenimiento del Socialismo” (“La Fiesta del trabajo. La Manifestación”, en: La Vanguardia, Buenos Aires, 6/5/1899, p. 1).
En octubre de 1899 colaboró con el artículo “¿Creéis en la Providencia?”, en la revista ABC del Socialismo que dirigió Adrián Patroni (ABC del Socialismo nº 5, Buenos Aires, 1/10/1899, p. 2; y nº 6, 8/10/1899, pp. 2-3). En noviembre de 1901 participó en una reunión organizada por el Centro Socialista Obrero (CSO), en la que se dirigió a las mujeres incitándolas a secundar el movimiento socialista.
A comienzos de 1903 está, junto a Gabriela Laperrière de Coni, entre las fundadoras de la Unión Gremial Femenina (UGF), con sede en el barrio porteño de Barracas, que concentraba numerosas fábricas que demandaban trabajo femenino (Fábrica Argentina de Alpargatas, Compañía General de Fósforos, talleres textiles, etc.).
Fue delegada al Congreso Obrero Gremial, convocado por el Comité de Propaganda Gremial en el salón del Club Vorwärts de Buenos Aires los días 7, 8 y 15 de marzo de 1903. Allí se constituyó la Unión General de Trabajadores (UGT), siendo designada para integrar su Junta Ejecutiva Nacional en calidad de Tesorera. Acompañaron a Cecilia en la Junta de la UGT Alejandro Mantecón, Felipe Gauna, Luis Poggi y Basilio Vidal. En representación de la Unión Gremial Femenina asiste también Emeteria Boria primero, Magdalena Rosolli después y, finalmente, Clementina Forti.
Cecilia participa de la marcha de la UGT y la Unión de Mujeres Socialistas del 1º de Mayo de 1903 que, partiendo de la Plaza Colón, se dirigió hasta el Congreso Nacional, donde Cecilia S. de Baldovino, Francisco Cúneo y Alejandro Mantecón encabezaron una comisión que entregó un petitorio a la Cámara de Diputados (“El 1º de Mayo en Buenos Aires. El meeting de los socialistas”, en: Caras y Caretas nº 240, Buenos Aires, 9/5/1903, p. 31).
En junio de 1903 es retratada por la popular revista Caras y Caretas cuando interviene, junto a otros dirigentes de la UGT —Basilio Vidal, Francisco Cúneo y Aquiles Lorenzo—, como oradora en el mitin organizado por la UGT en solidaridad con la huelga los estibadores del puerto de Valparaíso (Chile), violentamente reprimida (“Los sucesos de Valparaíso”, en: Caras y Caretas nº 245, Buenos Aires, 13/6//1903, pp. 42-44).
Según ha señalado Dora Barrancos a partir de su lectura de las actas manuscritas de la UGT:
A poco andar, Cecilia coloca objeciones sobre la manera en que andan las cosas. Es muy probable que no esté de acuerdo con ciertos manejos del Comité, sobre todo en lo que respecta a la posibilidad de engaños sobre la representatividad efectiva de algunos nucleamientos. En la sesión del 3 de junio de 1903 Cecilia se manifiesta: “[La Tesorera] hace constar que de las 28 sociedades que mandaron su adhesión […] sólo 17 han abonado sus primeras cuotas, no estando los demás, por consiguiente, adheridas de hecho, según prescribe los Estatutos de la Unión en su art. 10” (Libro de Actas UGT Sesión 1903, 3 de junio). Pero la voluntad de sus compañeros determina que esa cuestión debe quedar aplazada, “hasta que se haya normalizado la marcha de la Unión”. Cecilia se anima a enfrentarlos y envía circulares a todos los organismos reclamando la cuota, so pena de no ser reconocidos en la central, y la tormenta se desata. En la sesión del 1º de julio el tumulto es de consideración. Una buena mayoría apoya la moción de Basilio Vidal para “que se suspenda a la compañera Cecilia S. de Baldovino en el ejercicio de sus funciones […] hasta tanto no se retracte en una asamblea convocada al efecto del acto de indisciplina cometido, pasando por una resolución del Comité Nacional y de la Junta Ejecutiva de la UGT” (Libro de Actas UGT Sesión 1903, 1° de julio).
Dígase de paso que los únicos que aprueban una “censura simple” a la conducta de Cecilia son los obreros pintores, de la Capital y de San Nicolás. Una bien explicada abstención parten de su compañero, Luis Baldovino y de la compañera Roselli de la UGF, a quienes se unen los estibadores del puerto de La Plata. El temperamento de Cecilia puede medirse por su conducta en la sesión siguiente. Sigamos el registro del obrero Lazola, secretario de actas: “Se discute el proceder de la Tesorera con motivo de haber pasado varias notas poniendo en malas condiciones a la Junta Ejecutiva y al Comité Nacional: estando presente dicha compañera toma la palabra y lejos de retractarse confirma sus actos se entabla una acalorada discusión y la compañera Baldovino vuelve a faltar al Comité Nacional tratanlos(sic) de mistificadores y ambisiosos(sic) presentando su renuncia y retirándose de la sesión (Libro de Actas UGT Sesión 16/7/1903). El gesto determinado de Cecilia crea una “impasse”; es necesario resolver algo que, finalmente –tal vez sin que sus promotores lo imaginen– dará el triunfo a la osada Tesorera al imponerse la siguiente moción: “En vista de que la compañera Baldovino no se ha retractado e insiste formulando cargos hirientes y calumniosos […] que se pasen los antecedentes a las sociedades adheridas y que procedan en consecuencia por medio del voto general (énfasis mío, DB). A lo que se agregará: “que la compañera Baldovino continúe suspendida hasta que se pronuncie el voto general al respecto” (Libro de Actas UGT, Sesión 16/7/1903).
Esta pequeña guerra de Cecilia tiene un final interesante: el voto general –según la tradición sindical, “un hombre, un voto”– la confirmó como Tesorera con 431 adhesiones y le permitió ocupar el quinto lugar entre los siete más votados.
Dora Barrancos, “ Entre la celebración y el escarnio: mujeres contestatarias (1890-1900)” (1994), en: Ana Laura Martín, Adriana María Valobra (comps.), Dora Barrancos: Devenir feminista. Una trayectoria político-intelectual, Buenos Aires, CLACSO, 2019, pp. 107-108.
En enero de 1904 era oradora, junto a Clara Gugliermetti, en una “matinée” organizada por la UGF, sobre “la necesidad de que las mujeres se organicen y entren a la Unión Gremial Femenina” (“Unión Gremial Femenina”, en: La Vanguardia nº 2, Buenos Aires, 9/1/1904, p. 4). Junto a Laperrière de Coni intervino activamente para apoyar la huelga de las obreras alpargateras de la fábrica “La Argentina” de inicios de 1904, que concluyó con la conquista de un 10 por ciento de aumento en sus salarios. El 17 de abril de 1904 tomaba la palabra en un local de la UGF de la calle Umberto Iº.
Las mujeres de la UGF confeccionaban banderas rojas para los diversos locales socialistas. El 1º de Mayo de ese año intervino en el acto por el día del trabajo realizado en el local de la Circunscripción 2ª (Corrales), haciendo entrega de una bandera roja de seda. El domingo 21 de agosto de 1904 brindaba una conferencia, junto a Alejandro Mantecón, en el Centro Cosmopolita de Trabajadores de la localidad bonaerense de San Pedro. El 10 de septiembre de 1904 ofrecía una conferencia en la “función y baile” organizados por el centro socialista de la Circunscripción 18 (Las Heras).
Participa de las asambleas del Centro Socialista de la Circunscripción 2ª (Corrales), donde ofrece un aporte de 50 centavos mensuales para sostener la Escuela Popular de Morón. El 23 de septiembre de 1904 ofrece una conferencia para el Centro Socialista de la Circunscripción 18 (Belgrano). Cuando la 1ª sección de la UGF decidió su disolución, participó de la asamblea de 12 socias “no invitadas a asamblea de disolución” que tuvo lugar el 25 de septiembre de 1904 y que votó por reconstituirla, pagando a la UGT las cuotas correspondientes. Cecilia S. de Baldovino fue elegida secretaria de dicha sección 1ª.
Su marido Lucio Baldovino fue secretario de la Agrupación de Obreros en General y su representante ante la Federación Obrera Argentina (FOA) fundada en 1901, y dos años después miembro fundador de la UGT, la central obrera constituida por socialistas y sindicalistas revolucionarios.
Cecilia y Lucio tuvieron varios hijos: Heraclio María (n. 1887), Valeriano (n. 1888), Rómulo Mauro (1891), Angélica Liberta y Carmen. Carmen y Liberta Baldovino aparecían durante los años 1903 y 1904 entre los niños y niñas que recitaban poesías en las veladas socialistas.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2025), “Suero De Baldovino, Cecilia”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org.