SILVA, Dante (Italia, c. 1882 – ¿Buenos Aires, Argentina?, sin fecha precisa de fallecimiento).
Dramaturgo anarquista de origen italiano residente en la Argentina, deportado en 1905 por aplicación de la Ley de Residencia.
Nacido en Italia, arriba al puerto de Buenos Aires el 22 de marzo de 1896 con 14 años, probabablemente acompañado por su padre Angelo Silva. A comienzos del siglo XX se desempeñaba como empleado y colaboraba en el diario anarquista La Protesta.
Hacia 1902 publicó “Los Mártires” por la editorial de Bautista Fueyo, drama en un acto y prosa que tenía por protagonista a Marta, madre de un niño tísico y esposa de un militante enfermo y sin trabajo, que se encontraba amenazada de desalojo. El casero italiano, mensajero del propietario de la casa , ofrece a la mujer “perdonarle el alquiler” si ella acudía a una cita deshonesta (“Venderé mi cuerpo, pero salvaré tu vida”). Finalmente, el marido defiende a su mujer a cuchilladas.
Durante el año 1905 la pieza fue representada muchas veces por el Cuadro Filodramático “Germinal” y en 1906 por el Grupo Filodramático de la Unión de Joyeros (La Protesta, Buenos Aires, 9/9/1905, 30/3/1906 y 4/4/1906). El 27 de abril de 1907 se ofrecía otra función en el Centro Gallego de Avellaneda, organizada por el Cuadro Filodramático “Unión de Avellaneda”. Se siguió representando en años posteriores, por ejemplo en Salta a cargo del grupo “Nuevos rumbos”. E incluso más allá de la Argentina: en Chile fue puesta en escena en 1914 por el grupo “Arte y revolución” y en 1921 en Salto (Uruguay).
La obra estaba dedicada a José María Acha, panadero anarquista que por entonces activaba en el grupo “Aurora Social” de Rosario. El texto iba acompañado por unas palabras previas de Francisco Jaquet, secretario de la Federación Obrera Argentina (FOA, luego FORA) y líder de las grandes huelgas de 1902-1905.
Silva fue detenido por primera vez en agosto de 1904. Según informaba un corresponsal argentino al periódico montevideano La Rebelión, Dante Silva participaba de la recuperación que vivía el anarquismo argentino después de la represión sufrida entre fines de 1902 y comienzos de 1903. Sin embargo, señalaba el corresponsal, la policía no dejaba de actuar. La noche del 18 de agosto de 1904 los asistentes a una conferencia en el barrio porteño de Villa Crespo fueron asaltados por una docena de policías armados. Tomaron preso a Dante Silva, quien después de permanecer 5 o 6 días preso, tuvo que pagar 30 pesos para recuperar su libertad, siendo multado por “desorden en la vía pública” (Incógnito, “Desde Buenos Aires”, en La Rebelión nº 2, Montevideo, primera quincena sept. 1904, p. 3).
En agosto de 1904 dictaba una conferencia en una velada para recaudar fondos para los obreros zapateros detenidos. En efecto, el 15 de julio de
1904, en el contexto de una huelga de los obreros del zapato que se venía desarrollando desde mayo, la policía realizó una serie de detenciones. Entre los más de 40 obreros presos se encontraba el peluquero de origen italiano Antonio Loredo, condenado a 30 días de prisión por propagar “ideas subversivas” y aconsejar el “incendio y la destrucción”. La FORA promueve el 28 de agosto una importante velada para la recaudar fondos en el salón del Orfeón Español. Fue su programa: “Hijos Del pueblo” por la orquesta; conferencia del anarquista Víctor Béjar sobre el tema “Jueces, Penas y Cárcel”; puesta en escena del drama en tres actos “Honor, Alma y Vida” de Federico Urales y una conferencia a cargo de Dante Silva.
Silva frecuentaba por entonces, junto a Francisco Jaquet, Joaquín Hucha y Alfonso Grijalbo, el local de la Sociedad de Zapateros de la calle Gurruchaga, donde también sesionaba el grupo “Nueva Luz”.
A comienzos de febrero de 1905, en ocasión de la asonada radical abortada, el gobierno argentino presidido por Manuel Quintana decretó el estado de sitio por 90 días y aprovechó la ocasión para llevar a cabo una segunda leva de deportación de militantes anarquistas. Dante Silva fue conducido por un oficial de policía al buque “Maipú”, que funcionó varias semanas como una suerte de “cárcel flotante”, en compañía de otros detenidos. El buque arribó al puerto de Montevideo el 18 de febrero, deportando a Silva junto al zapatero español Mariano Barrajón, Blas Pirolo , Salvador de Luca, el zapatero español Manuel Manrique, Arturo Lori ►, el dirigente de los panaderos Joaquín Hucha, el cigarrero español y administrador de La Protesta Manuel Vázquez, el dirigente portuario Constante Carballo, el carpintero español Francisco Luna ►, el estibador español Juan Llorca, el panadero español Enrique Bilbao ►, el vidriero italiano Aurelio Paganelli ►, el peluquero italiano Antonio Marzovillo, Narciso Bartolozzi y el pintor español Constantino López ► (“La bancarrota social en la República Argentina bajo el estado de sitio”, en: La Protesta nº 523, Buenos Aires, 14/5/1905, p. 3).
Alberto Ghiraldo presentaba en 1905 a Silva en su libro La tiranía del frac en estos términos: “Italiano y casado. Reside en el país desde el año 1895. Es empleado. Muy joven y estudioso, ha merecido ser blanco de las iras autoritarias por haber colaborado en La Protesta” (Ghiraldo, 1905, p. 49).
Sus rastros se pierden desde entonces en la prensa obrera de la época.
Obra
- “Los Mártires”, Buenos Aires, Fueyo, s/f. (c. 1902). Fragmento de “Los mártires”, disponible en: Aquí.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2025), “Silva, Dante”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org.