PELLICER PARAIRE, Antoni / Antonio (seudónimos: Pellico, Luzbel) (Barcelona, Cataluña, España, 23/2/1851 – Buenos Aires, Argentina, 21/4/1916, según otras fuentes, 14/4/1916).
Artesano tipógrafo, periodista e intelectual anarquista de origen catalán, activo durante su juventud en la Federación española, de amplia actuación en Buenos Aires a fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX a favor de la organización obrera.
Hijo de una familia obrera de luchadores sociales, de Ramón Pellicer Padrol, zapatero, y Antònia Paraire Balart. Ingresó en la Sociedad de Obreros Tipógrafos a los once años, iniciándose como artesano cajista, el tipógrafo que se dedicada a componer y ajustar las páginas. Pocos años después, cuando Antoni es un adolescente, su padre muere en una manifestación popular en la rambla de Barcelona durante los acontecimientos de la revolución de 1868, asesinado a tiros por los Mozos de Escuadra (la policía de la Generalitat).
Perteneció a la primera generación internacionalista española. Acompañado por su tío y su primo, el tipógrafo anarquista Rafael Farga i Pellicer, participa de las primeras reuniones con Giuseppe Fannelli, que había sido enviado a españa por Mijail Bakunin. Pellicer y Rafael Farga están entre los fundadores de la Federación Regional Española, sección barcelonesa de la Asociación Internacional de los Trabajadores (AIT). Dentro de ésta, formó parte del grupo secreto de la Alianza de la Democracia Socialista (ADS), liderada por Bakunin. A pesar de su corta edad, pronto aparece como secretario de la Sección de Noografía y durante una temporada sustituyó a su primo al frente de la Federación Española.
Entre 1871 y 1875 tuvo lugar la primera emigración de Pellicer a México, Cuba y Estados Unidos, países a los que acude, según su propio testimonio, “con el componedor bajo el brazo por único caudal”. Aunque él mismo explica que cuando se encontró sin dinero y sintió deseos de regresar a España, tuvo que embararse como polizón. Una vez en alta mar, se presentó ante el capitán reconciendo su falta y tras recibir una reprimenda, trabajó como cocinero durante el resto de la travesía.
De vuelta en Barcelona, retomó su militancia en la sección secreta de noógrafos de la Federación. Fue parte activa en la creación de la nueva “Sociedad de Tipógrafos” y luego, en 1881, en su fracción anarquista “La Solidaria”, que se afilia a la recientemente creada Federación de Trabajadores de la Región Española (FTRE, 1881-1888). Asistió al Congreso de la FTRE que tuvo lugar en Sevilla en septiembre de 1882, siendo elegido miembro de la comisión federal. Allí se enfrentaron los anarcolectivistas (“legalistas) con los anarco-comunistas (insurreccionalistas). Pellicer se posicionó junto a su primo Farga i Pellicer con esta última tendencia. Fue uno de los redactores del órgano de la FTRE, La Crónica de los Trabajadores (Barcelona, 1882-1883).
Sosteniendo las posiciones del anarquismo colectivista de inspiración bukuninista, colaboró en La Revista Social (Madrid, 1881-1885), La Asociación (Barcelona, 1883-1889) y El Productor (Barcelona, 1887-1893). Contribuyó con su primo Rafael Farga a la fundación de Acracia. Revista Sociológica (Barcelona, 1886-1887), en la que firmaba sus artículos con la sola inicial “P.” Fue autor de una serie de breves piezas dramáticas de corte obrerista escritas en catalán: “En lo ball”, “Celos”, “Jo vaig”, “La mort de la proletària” y “Sense Esperança” que al día de hoy no han sido localizadas.
En mayo de 1888 fue uno de los organizadores del Congreso Amplio de Barcelona, que decidió la creación de la Federación Española de Resistencia al Capital (FERC). Disuelta la FTRE en 1888, pasó a militar en la Organización Anarquista de la Región Española (OARE), en el llamado Grupo Benevento (con Adrián del Valle Costa, Pedro Esteban, Anselmo Lorenzo Asperilla, Fernando Tarrida del Mármol, etc.) y en la nueva Sociedad de Impresores de Barcelona (SIB). El 10 de noviembre de 1889 fue secretario del jurado del II Certamen Socialista celebrado en Barcelona. En 1890 participó activamente en la organización de la primera huelga del Primero de Mayo por la jornada laboral de ocho horas.
El 29 de marzo de 1891 participó en un mitin unitario con los socialistas en el Circo Ecuestre de Barcelona organizado por la SIB. El 11 de noviembre de 1891 presidió un mitin, donde hablaron Francesc Abayà Garriga, Teresa Claramunt Creus, Errico Malatesta, Pere Esteve y Jaime Torrens Ros, en conmemoración del cuarto aniversario de los Mártires de Chicago, que se celebró en el Teatro Gayarre de la barriada barcelonesa de Sants. Como otros anarquistas de su tiempo, antes de emigrar a América ingresó en la masonería.
A fines de 1891 llega a Buenos Aires bajando desde Estados Unidos, México y Cuba, atraído por una tentadora oferta de trabajo de la casa importadora de máquinas, tintas y otros insumos gráficos Curt Berger & Cia., para dirigir la revista. La casa gráfica alemana le ofrecía 100 pesos oro mensuales de salario, y su amigo tipógrafo Eudald Canibell lo ayudó a decidirse. Sin embargo, la revista de esta empresa, Éxito gráfico. Revista mensual de Artes Gráficas, Buenos Aires, 1905-1916), recién salió a la luz varios años después, siendo dirigida por Pellicer hasta su muerte. Es posible conjeturar que la grave crisis económica de 1890 pospuso por varios años el proyecto de la casa Curt Berger & Cia de lanzar su revista.
Una vez arribado a la Argentina, Pellicer castellanizó su nombre de pila como Antonio, siendo llamado “Don Antonio” por los hombres de su oficio. Rafael Farga i Pellicer, fallecido en 1890, usaba el seudónimo de Justo Pastor de Pellico, de modo que es probable que desde entonces Antonio Pellicer haya asumido el seudónimo “Pellico” como homenaje a su primo.
Pellicer llegó con el propósito dirigir una revista profesional consagrada a las artes gráficas. Como carecía de recursos económicos propios, consiguió el apoyo de los industriales de origen italiano Pedro Tonini y Virgilio Colmegna, fundadores de la Imprenta Elzeviriana, de cuyas prensas salió La Questione Sociale (Buenos Aires, 1894-1896) de Fortunato Serantoni y toda una serie de folletos socialistas y anarquistas. La Elzeviriana fue una empresa progresista, que estableció por decisión de sus propietarios la jornada laboral de ocho horas y la negociación colectiva. El resultado de esta sociedad fue La Noografía. Revista mensual dedicada a la imprenta, a la librería y a las demás artes gráficas (Buenos Aires, 1899-1901). “Noografía” fue un neologismo creado en Barcelona, luego caído en desuso, para expresar con un solo término el conjunto de las artes gráficas. En años posteriores Pellicer emprendió la edición de otras revistas de su profesión, como El Cartófilo Sudamericano (Buenos Aires, 1904), La Tarjeta Postal y La Unión Cartófila Argentina, que editaba Pedro Tonini.
Pellicer fue muy activo en la Sociedad Tipográfica Bonaerense (STB). Asimismo, se contó entre los propiciadores y fundadores del Instituto Argentino de Artes Gráficas, escuela profesional gratuita fundada en Buenos Aires por el 11 de mayo de 1907. Dentro del Instituto, fundó su órgano, Anales Gráficos. Pellicer integró su consejo de administración, primero como presidente provisional (1907-1908) y luego como presidente electo (1909-1912). Además, fue quien recibió al primer curso de alumnos para presentar el programa de la materia Gramática española.
Si bien Pellicer no fue durante su periplo argentino un organizador político ni gremial, tuvo una diversificada actividad publicística, tanto en la prensa anarquista local como en el dictado de conferencias. Comenzó colaborando en Ciencia Social en 1899, donde se publicó la serie de sus “Conferencias sobre Sociología”, que aparecerían como folleto al año siguiente. Colaboró regularmente en La Protesta Humana entre 1899 y 1902. Por ejemplo, a comienzos de 1899 LPH reproduce a lo largo de tres números un “Memorándum para el obrero”, publicado originalmente en Ciencia Social con definiciones tomadas de las conferencias populares suyas sobre sociología. En la edición del 21/1/1900 se incluye su monólogo teatral, dedicado a los “Círculos de Estudios Sociales”, denominado “¡Fallido!…”.
Fue autor también de una serie de 12 artículos aparecidos en LPH entre noviembre de 1900 y enero de 1901, bajo el seudónimo de Pellico, sobre el tema de “La organización obrera”, basada en los principos de “Acratismo, Libre Pacto, Solidaridad y Federativismo”. A contrapelo de su compromiso insurreccionalista propio de su militancia catalana, es esta una de las contribuciones más importantes a la teoría “organizadora” anarquista en la Argentina, y que iba a tener inmediata gravitación. Según Santillán, “fue uno de los inspiradores principales de la Conferencia Obrera de la Argentina, siendo, puede decirse, el que llevó a la fundación de la Federación Obrera”.
Aunque Pellicer no participó personalmente del Congreso fundacional Federación Obrera Argentina (FOA) del 25 de mayo de 1901, ni de los sucesivos congresos obreros, acompañaba su movimiento desde la prensa ácrata. Por ejemplo, días después del Congreso de fundacional criticó severamente desde las páginas de LPH la resolución que propiciaba el arbitraje, moción redactada por Pietro Gori. Publicó también un artículo sobre la relación entre el empeoramiento de las relaciones laborales y la fundación de la FOA; sobre huelga general y situación del movimiento obrero hacia 1901 y 1902, etc. En 1901 aparece en un mitin del gremio de albañiles.
Hacia 1905 reduce su militancia, limitándose a reafirmar ideas y a interesarse por el anarquismo en España: mantiene nutrida correspondencia con sus viejos compañeros de militancia y colabora asiduamente en la prensa anarquista española (La Cuña, Liberación, Tierra y Libertad, etc.) y uruguaya (Futuro, Montevideo, 1904-1905), siempre como Pellico.
Colaboró también en revistas de su oficio, como La Voz del Arte (Buenos Aires, 1893-1895), Boletín de la Sociedad Tipográfica Bonaerense (Buenos Aires, 1901-1933?) y Almanaque de Instituto Catalán de las Artes del Libro (Barcelona, 1912-1913).
En 1906 publicó un folleto brevemente autobiográfico en el que sintetiza su pensamiento: “Memorándum con motivo y en celebración de mis 55º años”, donde incluyó su fotografía y su firma, y que distribuyó entre familiares, colegas y amigos.
Colaboró con su primo Rafael Farga en la obra que éste firmó como Justo Pastor de Pellico (dir.), Garibaldi. Historia liberal del siglo XIX. Ideas, movimientos y hombres importantes. Estudios filosófico-originales de escritores italianos, franceses y españoles, Barcelona, Establecimiento Tipográfico de E. Ullastres, 1882, 2 volúmenes
Casado con la catalana Elvira Domenech, tuvo dos hijos, Evelia y Coralto. Coralto Pellicer, que aprendió el oficio de su padre, también fue miembro destacado de la Instituto Argentino de Artes Gráficas.
Obra
- “Disquisiciones sociales. La Paz y el socialismo”, Barcelona, s/f.
- “En defensa de nuestros ideales”, Barcelona, 1894.
- “La Organización obrera”, Buenos Aires, Biblioteca de LPH, 1899.
- “Conferencias populares sobre sociología”, Buenos Aires, Biblioteca Geopolítica, Imprenta Elzeviriana, 1900 (reeditado en Barcelona por la Editorial de La Escuela Moderna).
- “Memorándum con motivo y en celebración de mis 55º años”, Buenos Aires, edición del autor, 23 de febrero de 1906.
- “El individuo y la masa. La educación de la libertad”, Barcelona, Salud y Fuerza, 1908.
- “La política juzgada por los políticos. Análisis de la cuestión de la vida”, Madrid, 1909.
- “Germen individualista”, Panamá, Diario de Panamá, 1912.
- Colección de escritos literarios-sociales, Cultura Obrera, 1916.
- “Análisis de la cuestión de la vida. Conferencias populares”, México, Tipografía “La Idea”, 1926.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2024), “Pellicer Paraire, Antonio”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org.