PEANO, Esteban (seudónimos: Grassi, Mario, Antonio, Perotti) (Buenos Aires, Argentina, 1898 – sin datos precisos de fallecimiento).
Dirigente gremial comunista de la localidad de Berazategui.
Nace en 1898 en el seno de una familia de inmigrantes italianos. En 1924 ingresa al del PC argentino, llegando dos años después a ser secretario de la región proletaria de Berisso, en la Pcia. de Buenos Aires (1926-1928). Se destaca como dirigente sindical de los obreros de los frigoríficos de Buenos Aires.
En 1930 viaja a Moscú como delegado de los obreros argentinos al V Congreso de la Profintern. A su retorno, es elegido miembro del Buró Político del PC argentino (1930-1934).
En 1934 es enviado por la Internacional Comunista a São Paulo, Brasil, para desarrollar tareas como “instructor” en el CC del Partido Comunisa de Brasil (PCB). En verdad, al igual que Rodolfo Ghioldi y otros dirigentes de la IC, colabora con los comunistas brasileños en la preparación de la fallida insurrección que iba a liderar Luis Carlos Prestes en 1935. Participa de la decisión de último momento de los comunistas paulistas de no plegarse a la insurrección iniciada en Río de Janeiro, por entender que la relación de fuerzas sociales y militares no eran favorables.
Previamente había declarado a un dirigente ruso con destino en Brasil que el PC brasileño estaba tan infiltrado que “no podía saberse dónde terminaba el partido y dónde comenzaba la policía”.
A su regreso en Buenos Aires, trabaja como obrero metalúrgico en una fábrica del barrio porteño de Parque Patricios. El CC del PC argentino decide cooptarlo nuevamente al Buró Político (1938), llegando a ser secretario de organización del CC. Pero con el retorno al país de Rodolfo Ghioldi tras cumplir casi cuatro años de prisión por su participación en la insurrección, en una reunión ampliada del CC en 1941 Peano es acusado de “sectarismo”, de “derrotismo” y de ser un “provocador”.
Emigró poco después al Brasil, aunque se cree que murió en Buenos Aires. En la historia oficial de PC elaborada en 1947 aparece aún estigmatizado como un “obrero desclasado que resultó ser un provocador” (Esbozo). Para el brasileño W. Waack, en cambio, la decisión de Peano (y de los comunistas paulistas) en 1935 de abortar el levantamiento en esa ciudad a último momento, fue llevada a cabo con fines de preservación partidaria.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2024), “Peano, Esteban”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org.