ESPÍNOLA, lidia

Lidia Espínola Ozuna nació en Asunción, Paraguay en 1956. En su juventud emigró hacia Buenos Aires, Argentina. Allí se asentó en Villa Jardín (Lanús, provincia de Bs. As.), lugar de una importante colectividad paraguaya. Se estima que allí conoció a quien fue su pareja, un obrero metalúrgico llamado Donato Corbo, argentino que militaba en el peronismo revolucionario.  

Entre 1973 y 1974 fue alfabetizadora en la Campaña de Reactivación de la Educación de Adultos para la Reconstrucción (CREAR), organizada por el Ministerio de Educación y por la Dirección Nacional de Educación del Adulto (DINEA) y planeada sobre la base de los postulados de Paulo Freire. Posteriormente, militó en el Movimiento Villero Peronista (MVP) mientras se desempeñaba como operaria en la empresa Prensiplast. Allí integró el Frente Sindical Metalúrgico de la Capital y fue aspirante en la organización político-militar peronista Montoneros. A finales de 1976 tuvo una hija con Corbo. 

Con la dictadura instaurada por el golpe cívico-militar del 24 de marzo de 1976 en la Argentina, tanto ella como su compañero se mudaron a Villa Caraza, dentro de Lanús Oeste (Bs. As.). El 19 de mayo de 1978 Lidia fue secuestrada en su casa por un grupo de tareas. Se la llevaron junto con su pareja y su hija de diecinueve meses. Al día siguiente, entregaron a la niña a su suegra Eva. A los dos días, un grupo de hombres armados y de civil volvieron al domicilio trayendo a Lidia para que vea a su hija. Según lo declarado por familiares, permanecieron alrededor de veinte minutos y se fueron con Lidia diciéndole a la suegra que en unos días volverían con su hijo. Tanto Lidia como su compañero Donato continúan desaparecidos.