DENAMBRIDE, Francisco

Nacido en Francia en 1868, emigra a la Argentina. En 1887 aparece en la Provincia de Santa Fe.

Poco después está en Buenos Aires como miembro de los grupos anarquistas “Amor Libre” y “La Expropiación”, colabora en el periódico anarcoindividualista El Perseguido (Buenos Aires, 1890-1897), desde cuyo taller de carpintería se expedía. 

El 1° de Mayo de 1892 es orador en el acto que organiza el Círculo de Estudios Sociales. En diciembre de 1893, tras el levantamiento radical, fue detenido, conducido al gabinete antropométrico para ser fotografiado y deportado a Montevideo junto a otros seis anarquistas, regresando a Buenos Aires poco después. 

En 1892 se unió a la militante anarquista María Elisa “Anita” Lagouardette, también migrante francesa. Un año después nacía su hija, a quien bautizaron con el nombre de Anarquía Denambride, pero la niña murió a los pocos años de nacer. En el censo de población de 1895 aparecen registrados en Buenos Aires el matrimonio y la niña, que entonces tenía dos años, así como Honorina Denambride, de 24 años, francesa, probablemente hermana menor de Francisco.

A mediados de la década de 1890 Anita Lagouardette inició una relación sentimental con otro compañero anarquista, Orsini M. Bertani. El anuncio de separación por parte de Anita terminó en mayo de 1896 en un intento fallido de femicidio por parte de Denambride. El suceso provocó un intenso debate en las filas ácratas.

Lagouardette, que sobrevivió a los cinco disparos de Denambride, enjuició el autoritarismo y la violencia “machista” de su compañero desde las páginas del periódico anarco-feminista La Voz de la Mujer (Buenos Aires, 1896), entablándose una polémica pública en la prensa anarquista (La fuerza de la razón, El Perseguido, La Voz de la Mujer) sobre unión libre, matrimonio y feminismo. 

Este último periódico hizo público el hecho, calificándolo del siguiente modo: “El proceder de ese individuo no es de anarquista, es de un verdadero burgués disfrazado, pero burgués despótico y tirano. […] La Voz de la Mujer, como defensora de los ideales del Comunismo Anárquico y por lo tanto, de la libertad de la mujer, no tiene por menos de estigmatizar el cobarde atentado del día 11 contra la libertad y la vida de una compañera” (“Última hora. A los defensores de Francisco Denambride”, en LVM nº 5, Buenos Aires, 15/5/1896, p. 4). Denambride contestó con un suelto que tituló “La verdad no puede perjudicar”.

Según la guía comercial e industrial publicada por la Sociedad Rural en 1912, por entonces tenía instalado su taller de carpintería en Av. Santa Fe 1044-1046, en la ciudad de Buenos Aires.

Según Diego Abad de Santillán, en su carpintería se realizaba la expedición de La Protesta. Cuando hacia 1927 el historiador del anarquismo buscaba antiguos militantes para reconstruir la historia del movimiento en la década de 1890, Denambride ofreció sus testimonio (Diego Abad de Santillán, «El anarquismo en la Argentina. Algunos datos sobre el período 1890 a 1897», en La Protesta. Suplemento Quincenal n. 260, Buenos Aires, 30/3/1927, p. 66.