ANTILLÍ, Teodoro (San Pedro, Pcia. de Buenos Aires, 27/7/1883 – San Pedro, Pcia. de Buenos Aires, 8/8/1923).
Periodista del anarquismo argentino, muy activo en la prensa ácrata en el primer cuarto del siglo XX.
Apenas concluidos los estudios primarios, trabajó en la oficina del Registro Civil de San Pedro y a la edad de 14 años pasó en calidad de “escribiente” a la policía de esa localidad bonaerense, donde se mantuvo hasta los 21 años.
Habiendo renunciado a su cargo por su involucramiento con el ideario anarquista, se instala entonces en Buenos Aires donde ejerce profesionalmente el periodismo en diversas revistas (como Fray Mocho y Mundo Argentino), en simultáneo con una intensa labor en la prensa anarquista. Su nombre está estrechamente vinculado al de Rodolfo González Pacheco, con quien impulsa a través de sucesivos emprendimientos periodísticos, una vertiente del anarquismo más radicalizada que la que representaba el diario La Protesta. Se conocen en Buenos Aires en 1906 en la redacción de Germinal que dirige González Pacheco, y un año después editan conjuntamente el periódico La Campana Nueva, lanzando en 1910 un proyecto más ambicioso: La Batalla. Diario anarquista de la tarde (Buenos Aires, nº 1 [7/3/1910] – n° 63 [13/5/1910]), vespertino que aparece en paralelo al matutino La Protesta. Durante algo más de dos meses la prensa anarquista argentina contó con dos diarios, un matutino y un vespertino.
En el marco de la represión contra el anarquismo desplegada con la celebración del Centenario (1910), el diario es clausurado a mediados de mayo y sus directores deportados al Penal de Ushuaia.
Una vez libres fundan, con el concurso de Apolinario Barrera, el periódico Alberdi (Buenos Aires, 1910). En 1911 llevan a cabo otro emprendimiento periodístico, también de breve duración: El Manifiesto (Buenos Aires, 1912-1913).
Cuando González Pacheco marcha a México, las Antillas y España, Antillí se integra a la redacción de La Protesta. A fines de 1913, a raíz de un artículo en defensa del anarquista vindicador Simón Radowitzky («Radowitzky», en LP, 14/11/1913), es condenado a prisión junto al administrador del diario, Apolinario Barrera, acusados de «apología del delito». La apelación en su defensa llegó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación y falló en contra de su libertad, de modo que sufrió tres años de cárcel.
En 1916 se retira en disidencia de este periódico junto con González Pacheco, que había retornado al país, para intentar refundar La Protesta Humana y editar luego el periódico La Obra (Buenos Aires, 1916-1919), fuertemente influido por la experiencia de la Revolución Rusa de 1917.
Los «anarco-bolcheviques» que editaban Bandera Roja (Buenos Aires, 1919) les proponen el lanzamiento conjunto de un gran diario anarquista. Pero por diferencias en torno al bolchevismo y la Revolución Rusa, no alcanzan a cerrar un acuerdo.
Clausurada La Obra en mayo, tras los sucesos de la Semana Trágica (enero de 1919), Antillí lanza con González Pacheco y Alberto S. Bianchi Tribuna Proletaria. Diario de la mañana, abierto a las diversas tendencias que dividían al anarquismo. Cuando este diario es clausurado en marzo de 1919, su control había pasado a manos de los «anarco-bolcheviques».
Es así que el grupo de Antillí, González Pacheco y Bianchi lanza en 1920 otro periódico: El Libertario (Buenos Aires, mayo-octubre 1920).
Antillí es uno de los fundadores de La Antorcha (Buenos Aires, 1921-1932), semanario comunista anárquico que toma distancia de la experiencia soviética, asumiendo una tendencia cercana a los anarquistas “expropiadores” y los “vindicadores”, que polemiza fuertemente con el anarquismo más moderado de La Protesta. Antillí fue uno de los redactores más prolíficos de este periódico, e incluso muchos de sus artículos inéditos se siguieron publicando incluso después de su muerte.
Enfermo gravemente, su amigo González Pacheco lo ayuda a trasladarse a San Pedro, en la Provincia de Buenos Aires, para pasar sus últimos días en su casa natal. Sus restos fueron sepultados al pie de un eucalipto.
Estaba unido a Lidia Irigoiti, hija del anarquista Juan Irigoiti, de Ensenada, y hermana de Anselma Irigoiti, compañera de González Pacheco.
González Pacheco edita poco después sus artículos de La Antorcha en un libro póstumo: ¡Salud a la Anarquía! (1924).
Obra
- “Patria y Militarismo. Conferencia leía a los trabajadores de San Pedro el 25 de mayo”, [¿Buenos Aires?], Grupo Pro-Organización, 1907.
- “Comunismo y anarquía”, Buenos Aires, Grupo Editor Acracia, 1919.
- (con Federico Antonio Ritsche) “Primer Congreso Anarquista de la Región Argentina. Octubre de 1922. Resumen crítico”, Buenos Aires, Archivo Libertario, 1923.
- “Federalismo – Centralismo”, Buenos Aires, Federación Obrera de Sindicatos Ferroviarios, 1924.
- ¡Salud a la Anarquía! Páginas de un militante, Buenos Aires, Las Antorchas, 1924, selección y prólogo de Rodolfo González Pacheco.
- Seamos rebeldes. Folletos y otros escritos, Buenos Aires, ¿Libertad!, 2014, sel. y pról. de M. S. C., presentación de Antillí de Anderson Pacheco.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2019), “Antillí, Teodoro”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org