CABO, Dardo Manuel (apodo: Lito; nombre de guerra: Manuel) (Tres Arroyos, Provincia de Buenos Aires, Argentina, 1°/1/1941 – Brandsen, Provincia de Buenos Aires, Argentina, 8/1/1977).
Periodista, militante nacionalista, luego dirigente montonero y director de la revista El Descamisado.
Hijo del sindicalista metalúrgico peronista Armando Cabo (1915-1996), cercano a Eva Duarte de Perón. Nació en la ciudad de Tres Arroyos, al sur de la Provincia de Buenos Aires. Es un niño cuando sus padres se separaron, radicándose desde entonces con su madre, María Campano, en la Ciudad de Buenos Aires. Aquí ingresa como pupilo al Colegio San José. El 16 de junio de 1955, cuando tenía 14 años, su madre María Campano moría en medio del bombardeo a la Plaza de Mayo llevado a cabo por aviones de la Armada Argentina. Inicia su militancia en la adolescencia en las filas de Movimiento Nacionalista Tacuara, de extrema derecha. Padece prisión en tres ocasiones, entre fines de la década de 1950 e inicios de la siguiente. En 1961 se separa de Tacuara, convirtiéndose en cabeza del Movimiento Nueva Argentina, de orientación nacionalista católica proclive al peronismo. Forma parte, así, de los grupos que se reconocían entonces como Movimiento Juventud Peronista, una de cuyas figuras salientes era Envar “Cacho” El Kadri, con quien suele quedar enfrentado en las discusiones y en las peleas callejeras por las posiciones más izquierdistas de aquél.
Entre octubre de 1965 y julio de 1966 es responsable de la custodia de Isabel Martínez de Perón durante su visita al país en el marco de la disputa por el control del movimiento peronista entre el líder metalúrgico Augusto T. Vandor y el Gral. Perón en el exilio. Con apenas 25 años y como jefe de esa agrupación de derecha, dirige el mediático “Operativo Cóndor”, cuando dieciocho militantes peronistas secuestran un avión de Aerolíneas Argentinas que se dirigía al sur del país y lo desvían para “invadir” las Islas Malvinas con el objetivo de hacer una ocupación simbólica, a propósito de la visita a la Argentina del Duque de Edimburgo. El operativo, realizado el 28 de setiembre de 1966, fue presenciado por el director del diario Crónica y de la revista Así, Héctor R. García, a quien Cabo tentara para ser testigo exclusivo del suceso. La audaz idea habría sido sugerida por María Cristina Verrier, periodista y única mujer que participa del operativo, con quien Cabo termina casándose mientras se halla en prisión. Al hacer tierra en las islas, el grupo Cóndor izó brevemente la bandera argentina y cantó el Himno Nacional, para ser rápidamente sitiado por las autoridades y remitido de vuelta al continente. Las fuerzas de seguridad del gobierno militar que preside Gral. Juan C. Onganía los detienen en el acto y envían a la cárcel de Río Gallegos. Como responsable del operativo y por tener antecedentes penales, Cabo es condenado a tres años de prisión.
Hacia 1969 sale en libertad, viajando a Madrid para entregarle a Juan D. Perón en su casa de Puerta de Hierro las banderas del Operativo Cóndor. Comienza entonces a trabajar como periodista en la revista Extra, con Miguel Bonasso como jefe de redacción. Por entonces se convierte en jefe de Descamisados, grupo armado fundado en 1968 por Norberto Habegger y Horacio Mendizábal con otros jóvenes demócrata-cristianos y provenientes del nacionalismo católico que desde el trabajo en “villas miseria” y la militancia en fábricas de Buenos Aires (incluida la experiencia de la CGT de los Argentinos) habían terminado por adoptar una identidad peronista. El grupo se organiza en forma independiente para la lucha armada al frustrarse un primer intento de incorporación a las Fuerzas Armadas Peronistas (FAP). Su primera aparición pública es en noviembre de 1970 en un cine de La Tablada durante la proyección de La Hora de los hornos, la película de Fernando “Pino” Solanas y Octavio Getino que representó un hito en el cine político argentino. Entre las “acciones” más notorias asumidas por Descamisados se cuentan la voladura del Círculo Naval de Tigre, la del yate de un comandante en jefe de la Armada, el secuestro contra rescate de un millón de dólares del gerente de la Compañía General Electric–ITT en San Isidro, además de asaltos a entidades financieras.
Sin embargo, la más importante operación realizada por Dardo Cabo y otros futuros integrantes de esa organización habría sido el asesinato de Vandor en la propia sede de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) el 30 de junio de 1969, aunque no se adjudicaran el atentado en ese momento. Sólo un año después un “Comando Montonero Emilio Maza del Ejército Nacional Revolucionario” (ENR) lo haría, al igual que con el caso del sindicalista José Alonso. Y uno de sus miembros —probablemente el propio Dardo Cabo— relataría tiempo después el operativo al semanario El Descamisado.
Desde principios de la década de 1970 los Descamisados se acercan a Montoneros, primero a través del proyecto de las Organizaciones Armadas Peronistas (OAP) y finalmente, fundiéndose en el transcurso de 1972. Contando entre su experiencia profesional la colaboración en la prestigiosa revista Nuevo Hombre antes de ser orgánica del PRT, Cabo coordina los ámbitos de discusión de los periodistas montoneros. En 1973 continúa esa actividad como dirigente del Bloque de Trabajadores de Prensa que incluía también a los integrantes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR). Por entonces ya es el director del periódico montonero El Descamisado, cuyo primer número aparece en mayo de 1973 y se convertiría en una publicación emblemática de la prensa militante de la época, llegando a alcanzar una tirada masiva. Desde sus editoriales Cabo interviene en la lucha política de esos años vertiginosos en que Montoneros enfrenta el avance de la derecha avalado por el Gral. Perón tras el breve interregno presidencial de Héctor J. Cámpora. De hecho, El Descamisado termina siendo clausurado mientras Perón es Presidente de la Nación, en abril de 1974, luego de que se acusara desde allí al Ministro de Bienestar Social, José López Rega, de la muerte del militante del Movimiento de Villeros Peronistas Alberto Chejolán durante una protesta callejera.
Siendo parte de la conducción montonera de la Capital, en octubre de 1973 Cabo viaja en delegación de visita a Cuba. El 17 de abril de 1975 es detenido por la policía bonaerense de San Justo, Morón, cuando participaba de la operación de cobro de una parte del rescate de los hermanos Born, secuestrados por Montoneros. Torturado por las fuerzas de seguridad, es trasladado a la cárcel de Sierra Chica (Provincia de Córdoba), al igual que otros dirigentes detenidos. Para comienzos del año 1977 permanecía preso junto a otros “cuadros” montoneros en uno de los “pabellones de la muerte” de la cárcel de La Plata que regenteara el Cnel. Ramón Camps, responsable del Primer Cuerpo de Ejército y de actuación tristemente célebre en la represión desatada por la dictadura instaurada en 1976. El 6 o el 8 de enero, según difieren las fuentes, Dardo Cabo y su compañero de cautiverio Roberto Rufino Pirles fueron fusilados durante un “traslado” desde esa unidad penitenciaria —tenía entonces un brazo inmovilizado por la tortura—, aunque el asesinato fue oficializado como producto de una supuesta aplicación de la “ley de fuga”. En el año 2010 se inició un proceso en la justicia de La Plata contra los agentes del Servicio Penitenciario Bonaerense responsables de la vida de Cabo y Pirles. Dos años después, era detenido el coronel retirado Orlando Miguel “Arcángel” Ruarte, quien firmó la orden de “traslado”. Finalmente, fue liberado en el año 2015.
Tuvo con María Cristina Verrier una hija a la que llamaron María. En 2021 Vicente Palermo le consagró una suerte de biografía novelada, La vida breve de Dardo Cabo, donde lo presenta como un exponente del “peronismo plebeyo”.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2021), “Cabo, Dardo”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org