GOLTZ, Emilio (Kiel, Schleswig-Holstein, Alemania, 1889 – Sin más datos de nacimiento o fallecimiento).
Panadero. Colaborador financiero del periódico anarcosindicalista paraguayo El Combate.
Oriundo de la ciudad alemana de Kiel, emigró durante el giro de siglo hacia la región del Río de la Plata.
De oficio panadero, en junio de 1915 su nombre aparece en los principales medios de prensa de Montevideo y la región por haber sido detenido junto a Constante Rebagliatti, acusados de querer colocar una bomba en un local de panadería cuyo propietario tenía conflictos con sus empleados.
Los medios tradicionales, como Caras y Caretas de Buenos Aires, replicaron la información del parte policial recibido desde Montevideo. Allí se informaba que “(…) Emilio Goltz y Constante Rebagliatti fueron detenidos por haberse encontrado en su poder un petardo cargado con dinamita” y que “la bomba estaba destinada a ser colocada en los sótanos de la panadería de Pedro Ducombs, en la calle Colonia 950”. Según lo informado por Caras y Caretas, los detenidos “declararon que el móvil de su tentativa tiene por origen las continuas divergencias entre patrones y obreros, en determinados negocios de esta capital”.
La Protesta de Buenos Aires publicó un descargo de Goltz y Rebagliatti en donde estos denunciaron haber sido torturados en la sede de Investigaciones de la Policía de Montevideo, negando que la bomba secuestrada fuese de ellos. Durante toda la segunda mitad de 1915, mientras ambos permanecieron en prisión, desde La Batalla (Montevideo) y La Protesta, se llevó a cabo una campaña de denuncia sobre el caso, reclamando la liberación de ambos.
En una de aquellas notas, escrita por Samuel Blois, se afirma que Goltz había llegado de Rosario —donde había quedado su familia— a Montevideo solo unos días antes del hecho, y que la detención se había efectuado el 11 de julio, dándose a conocer la noticia apenas el 24, lo que abona la hipótesis de que fueron torturados y que esa ventana de dos semanas entre la detención y la aparición de la noticia fue para esperar a que desaparecieran las marcas físicas. Asimismo, se publicaron declaraciones de diversas sociedades pidiendo su libertad, como las del Centro de Estudios Sociales de Villa Muñoz o la Sociedad de Resistencia de Obreros Panaderos de Montevideo.
En noviembre de 1915, el fiscal de la causa solicitó la pena de 16 meses de prisión, pero en enero de 1916 fueron liberados por el juez.
Goltz llegó a Paraguay entre 1916 y 1917 y se convirtió en uno de los principales financiadores de El Combate (1916-1920), periódico editado por el Centro Obrero Regional del Paraguay (CORP), de tendencia anarcosindicalista. De acuerdo con Ciriaco Duarte, Juan Deilla le había señalado: “los dioses sabrían de dónde sacaba el dinero para cubrir los déficit de nuestro periódico; lo que sí, solo pedía 24 horas de tiempo y salvaba la situación”, expresión que dejaría abierta la especulación de si nuestro biografiado realizaba actos de expropiación.
Emilio Goltz fue visto por última vez en 1947 en la ciudad de Coronel Bogado, Itapúa, al sur de Paraguay, durante la guerra civil de aquel año.
Cómo citar esta entrada: Montero, Mariano Damián (2025), “Goltz, Emilio”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org.
