GRECO, Rafael (sin datos de nacimiento y muerte)
Obrero metalúrgico, secretario general de su gremio en la década de 1920, dirigente socialista de izquierda, luego comunista, finalmente comunista disidente.
Nacido en el seno de una familia obrera en torno al año 1900, aprendió desde temprano el oficio de obrero metalúrgico. Líder de una de las asociacione de obreros metalúrgicos, formó parte de la generación de jóvenes socialistas atraídos por la Revolución Rusa y la experiencia soviética.
El sábado 22 de noviembre de 1919 asistió como delegado por los metalúrgicos a la asamblea constitutiva de Unión Obrera Local (de la Ciudad de Buenos Aires), siendo elegido miembro suplente del Consejo (“Federación Obrera Local”, en: El Obrero Gráfico nº 102, 1/11/1919, p. 6).
Apoyó a principios de la década de 1920 las posiciones del “Grupo Claridad” y formó parte de la tendencia “tercerista”, así denominada por proponer la adhesión del PS a la Tercera Internacional. Esta fracción fue expulsada tras el IV Congreso Extraordinario reunido en Bahía Blanca entre el 8 y el 10 de enero de 1921.
Los “terceristas” realizaron los días 26 y 27 de febrero de 1921 en el salón del Teatro “Roma” (Avellaneda, Pcia. de Buenos Aires) el que se conoció como el “Congreso de las Izquierdas”. Próximos a las posturas del PC, que había roto con el PS a fines de 1917, en el congreso se expresaron dos posturas: por un lado, militantes como Rafael Greco, José P. Barreiro, Silvano Santander y otros sostuvieron la postura de proponer a los comunistas un congreso de fusión, mientras que la corriente que expresaban militantes como Carlos Mauli, Orestes Ghioldi y Verde Tello propugnaron ingresar al PC sin condiciones. Triunfante la última postura, Greco ingresó con los “terceristas” al PC.
En 1922 está entre los fundadores del Sindicato Obrero de la Industria Metalúrgica (SOIM), que adhiere a la Unión Sindical Argentina (USA). El nuevo sindicato era el resultado de la unificación de varias asociaciones de oficios y de la Federación Obrera Metalúrgica. Aunque los sindicatos metalúrgicos habían estado disputados entre anarquistas, socialistas y sindicalistas, a partir de entonces empiezan a cobrar peso los metalúrgicos comunistas. Rafael Greco se mantendrá como secretario general del SOIM a lo largo de la década de 1920.
En el contexto de las tormentosas divisiones internas que agitaron la vida del PC en la década de 1920, Greco fue expulsado en 1922 acusado de “centrista” y “oportunista”, readmitido en 1923 y nuevamente expulsado en 1925 cuando formaba parte de la fracción de izquierdas, “chispista” (así llamada porque editarán el periódico comunista de izquierda La Chispa). Cuando esta ruptura se consuma a fines de 1925, la dirección del SOIM quedó desde entonces y hasta inicios de la década de 1930 en manos de los “chispistas”, que a comienzos de 1926 van a crear al Partido Comunista Obrero (PCO). Greco está entre los miembros de Comité Central junto al chofer Cayetano Oriolo, el obrero del calzado Teófilo González la maestra Angélica Mendoza, el gráfico Modesto Fernández, el obrero escultor Pascual Loiácono , el director teatral Emilio Satanowski, el zapatero Salvador Scavelli y el ebanista Mateo Fossa. Asimismo, Greco es colaborador de La Chispa.
Al año siguiente, Rafael Greco es delegado al primer congreso del PCO realizado los días sábado 13 y domingo 14 de agosto de 1927 en un local de la calle Victoria 2485, siendo nuevamente elegido miembro del Comité Central, y además de integrante del Comité de Organización y del Comité Central Sindical. En noviembre de 1926 (y nuevamente en noviembre de 1927 y noviembre de 1928) es uno de los candidatos a concejal que presenta el PSO en la Capital.
El 21 de agtosto de 1927 toma la palabra, junto a Pascual Plescia y Angélica Mendoza, en unos de los palcos instalados en la Plaza de los Dos Congresos de la Ciudad de Buenos Aires en el acto por la libertad de Sacco y Vanzetti, los anarquistas italianos condenados a muerte en los Estados Unidos. Según las crónicas periódísticas, hablan en nombre de la Unión Sindical Argentina (USA).
En octubre de 1927 viaja a la URSS como delegado de la Unión Obrera Local y del SOIM para participar de la celebración del 10° aniversario de la Revolución de Octubre. Asimismo, llevaba conjuntamente con Abraham Reznik las credenciales para representar a la Liga Antiimperialista, controlada por los “chispistas”. Pero las maniobras de Victorio Codovilla hicieron que se lo deporte de la Unión pocos días después de su llegada, declarándoselo “persona indeseable”. La USA reclamó por la deportación, y su propuesta llegó hasta el presidente de la Internacional Sindical Roja, Losovsky. El asunto fue largamente discutido en los meses siguientes en las asambleas del SOIM, pero los metalúrgicos comunistas, buscando desacreditarlo, argumentaron que en los pocos días que Greco estuvo en Moscú había tomado contacto con un alto miembro de la Oposición.
En marzo de 1928 es segundo candidato a diputado por el PCO en las elecciones nacionales, a las que Angélica Mendoza se presenta como candidata a la presidencia. En mayo de 1929 Greco está en Montevideo como delegado del SOIM al Congreso Sindical Latinoamericano, hegemonizado por los comunistas.
Pero los sucesivos intentos del PCO por sortear el cerco del PC oficial para hacerse escuchar en forma directa por los dirigentes de la Komintern fueron infructuosos. Desde La Chispa apelaron incluso al elogio de Stalin, pero tanto los comunistas argentinos como los soviéticos identificaban a los “chispistas” como comunistas disidentes y los consideraban alineados con la Oposición soviética. La sospecha lanzada sobre Greco en Moscú, aunque altamente improbable o directamente imposible, resultaba creíble en ese escenario.
Tras la disolución del PCO a fines de 1929, no se ha identificado otra presencia pública de Greco. Emilio J. Corbière señala escuetamente que “años después sería un importante industrial”. En numerosas guías comerciales de las décadas de 1940 y 1950 es posible encontrar una empresa de carpintería metálica denominada “Rafael Greco y Cia”, situada en la calle Roseti 941 de Buenos Aires. También recoge el testimonio oral según el cual Greco había dirigido desde Buenos Aires algunas cartas a V. I. Lenin, pero hasta el presente no se han localizado.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2023), “Greco, Rafael”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org.