MARZOVILLO, Antonio (seudónimo: Incógnito) (Italia, 1880 – Montevideo, Uruguay, 04/07/1959,).
Peluquero anarquista de origen italiano, radicado primero en Buenos Aires y luego en Montevideo, editor de La Voz del Peluquero, Tiempos Nuevos, El Anarquista y La Batalla.
Militante anarquista de origen italiano nacido en 1880 del zapatero italiano Vicente Marzovillo y la costurera italiana Ángela Usana. Antonio es el tercero de los cinco hijos del matrimonio. Los mayores fueron: Luis (zapatero), Rosa (costurera), Antonio (peluquero) y Nicolás. En el año 1895 todos residían en Buenos Aires cuando fueron registrados por el Censo Nacional de Población. Antonio declara saber leer y escribir. A sus 15 años ya se desempeñaba como peluquero.
Antonio participó en la propaganda del periódico italiano L ’Avenire (Buenos Aires, 1895-1904) -compartiendo la redacción con Orsini Bertani-, y colaboró en La Protesta Humana (Buenos Aires, 1897-1903). Fundó el primer periódico de su gremio, La Voz del Peluquero, que defendía los intereses de los oficiales contra los patrones y contó en la redacción con la colaboración de Vicente L. Caccuri.
El 1° de mayo de 1904 Marzovillo fue herido de bala bajo el brazo izquierdo, durante la marcha celebrada desde la Plaza Congreso a la estatua de Mazzini en el Paseo de Julio, en la que fue muerto el obrero Juan Ocampo ►. En junio de ese mismo año intervino en las deliberaciones del congreso de la Federación Obrera Rosarina.
En febrero de 1905 el gobierno argentino le aplicó la Ley de Residencia, expulsándolo del país. En su libro La tiranía del frac, Alberto Ghiraldo lo retrataba de este modo:
Antonio Marzovillo. Italiano, 25 años y 18 de residencia. Tiene dos hijos. Oficio: peluquero; una tijera de primera fuerza y una conciencia ídem. Puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que este joven obrero vale más de lo que pesa.
Alberto Ghiraldo, La tiranía del frac… (crónica de un preso), Buenos Aires, Biblioteca de ‘Martín Fierro’, 1905, p. 45.
Se radicó entonces en Montevideo, donde participó de las actividades del Centro Internacional de Estudios Sociales (CIES) y fundó una agrupación editora de folletos de propaganda, bajo la denominación de Tiempos Nuevos. Colaboró con el periódico del mismo nombre (Tiempos Nuevos, Montevideo, 1903), en el que firmaba sus producciones con el seudónimo Incógnito (en el que también colaboraron Claudio Morán y Armando Patiño, entre otros y otras).
Admirador de la propuesta pedagógica de Francisco Ferrer, al responder a una encuesta realizada por la revista porteña Mundo Argentino, hacía caudal de los métodos de la Escuela Moderna:
Es necesario enseñar a los individuos que deben pensar y obrar bajo su propia responsabilidad sin aguardar impulso de nadie. Si se acostumbran a contar solamente consigo mismos para manejar sus propios asuntos, si saben hacer que se respete su autonomía y respetar la de los demás, eso será un elemento de buen éxito para la realización de su felicidad futura.
Buenos Aires, Mundo Argentino.
Colaboró asimismo en Infancia (Montevideo, 1912-1916), el órgano de la Liga Popular para la Educación Racional de la Infancia.
Junto a Carlos Balsán se encargó de editar en Montevideo, el 15 de mayo de 1910, un número de La Protesta argentina, que había sido clausurada luego del asalto e incendio de su local en la represión que coincidió con la celebración del Centenario.
Integrante de los núcleos que reactivaron la Fedración Obrera Regional Uruguaya (FORU), tomó parte protagónica en el Congreso celebrado en mayo de 1911.
Se opuso a la tendencia anarco-batllista, valiéndose de la prédica de El Anarquista, que editó en 1913 junto a Juan Borobio ►.
Fue redactor principal de La Batalla. Periódico de ideas y de críticas (Montevideo, 1915-1930), fundado por su consuegra María Collazo, desde cuyas páginas impulsó en 1916 la reorganización de la FORU. El órgano defendió el proceso abierto con la Revolución Rusa de 1917. Siete años más tarde, Marzovillo se involucró activamente en el proceso de constitución de la Unión Sindical Uruguaya (USU), de orientación anarcosindicalista.
Casado de Alberta Tempesta, tuvieron varios hijos a los que bautizaron con los nombres de Ideal, Primavera, Porvenir, Hércules, Armonía, Violeta, Dalia, Lirio y Azucena.
Antonio Marzovillo falleció en Montevideo el 4 de julio de 1959.
Cómo citar esta entrada: Zubillaga, Carlos (2023), “Marzovillo, Antonio”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org.
Primera edición de la entrada: Carlos Zubillaga, Perfiles en sombra. Aportes a un diccionario biográfico de los orígenes del movimiento sindical en Uruguay (1870-1910), Montevideo, Librería de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, 2008.