VAESKEN, Emilio

Hijo de Eugenio Vaesken Vanhersecke (de origen francés) y de Petrona Irene Alfonso.

En 1942 ingresó como alumno en el Teatro Colón de Buenos Aires. El 15 de agosto de 1943 actuó junto a Francisco Alvarenga y José Asunción Flores en un festival organizado para conmemorar el aniversario de la ciudad de Asunción. El evento lo organizó la Asociación de Músicos del Paraguay (AMP) y Vaesken se presentó integrando la Agrupación Folklórica Guaraní.

El trío de profesionales y amigos (Flores, Vaesken y Alvarenga) junto a Carlos Lara Bareiro, Luis Cañete, Florentín Giménez, Arturo Pereira y Severo Rodas, conformaron una generación de reconocidos músicos miembros o compañeros de ruta del PCP que contribuyeron a que la política cultural del partido ganara prestigio. No se ha establecido si esta afinidad con el PCP fue producto de decisiones individuales o a un trabajo político del partido en el gremio de los músicos. No obstante, investigadores cercanos al partido sostienen que este trabajó en la Asociación de Músicos Paraguayos (AMP) en pro de una célula comunista y posiblemente el reconocimiento de José Asunción Flores como miembro del PCP hizo que la agrupación fuese atractiva a otros colegas.

Con la conmemoración del 29 aniversario de la Revolución de Octubre el 7 de noviembre de 1946 se hizo más visible la cercanía de un grupo de músicos selectos del Paraguay con el PCP. Paraguay se encontraba en un breve proceso de apertura política conocido como Primavera Democrática durante la dictadura de Higinio Morínigo (1940-1948) y el partido pudo actuar legalmente durante seis meses de ese año. Cosa excepcional porque desde su fundación en 1928 solo había contado con legalidad dos semanas de 1936 y luego de la apertura de 1946 volvería a la ilegalidad hasta la caída de la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989). Así que para el 29 aniversario se concretó un festival artístico en el Parque Carlos Antonio López con el lema: “apoyo al establecimiento de las relaciones diplomáticas, económicas y culturales entre el Paraguay y la Unión Soviética”.

Desde Buenos Aires viajaron Francisco Alvarenga, Emilio Vaesken y José Asunción Flores expresamente para participar de este acto y otros más modestos los días posteriores.

El catedrático Antonio González Rioboó hizo uso de la palabra y criticar que Paraguay era el único país del continente “exento de una unión necesaria e impostergable” con la Unión Soviética. En el mismo acto pronunciaron discursos Alberto Candia y Obdulio Barthe.

Luego de esta breve experiencia democrática y el desencadenamiento de la Guerra Civil paraguaya de 1947, Vaesken fue “marcado” como “comunista”. El 19 de marzo de 1948, a la edad de 32 años, Vaesken anunció su retiro de los escenarios y de su carrera artística sin expresar motivo. Se despidió con una interpretación de la canción “Nde rendape ayú”.

El resto de su vida vivió entre Buenos Aires y Asunción porque visitaba con frecuencia a su amigo José Asunción Flores, quien tenía prohibido el ingreso al Paraguay y la distribución de sus canciones. Se ha establecido que durante la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989), Vaesken fue objeto de constante vigilancia:

“Se observó en la calle Eligio Ayala y Perú al comunista Emilio Vaesken de estar conversando con una persona desconocida durante 10 minutos (…) Vaesken siguió a pie hasta llegar y entrar a una carnicería (…) donde demoró 15 minutos, después sale y sube en un tranvía en la esquina de Mariscal López y República Francesa”

Informe policial del 14 de abril de 1960.

Al que se suma otro del 7 de junio de 1961: “Fue observado en la calle Palma y Colon el comunista Emilio Vaesken, en momentos en que se encontraba conversando con Agustin Barboza, conversaron durante 10 minutos”

Cuando en 1972 falleció Flores en Buenos Aires, Vaesken dejó sus viajes a la capital Argentina. A mediados de los setenta comenzó brindar asesoría a organizadores de los Festivales del Takuare’e de Guarambaré donde actuaría y sería homenajeado en 1989 tras la caída de la dictadura.

Sus últimos años de su vida se estableció en Asunción y reivindicó la figura y la obra de José Asunción Flores. Falleció en esa ciudad el 16 de junio de 1990.