PEYRET, Alexis (en Argentina castellaniza su nombre como Alejo) (seudónimos: Filópolis, Un estranjero) (Serres-Castet, Bearn, Francia, 11/12/1826 – Buenos Aires, Argentina, 27/8/1902).
Docente, escritor, periodista, masón, librepensador, militante político del republicanismo radical en Francia, pionero de la colonización y precursor del socialismo en la Argentina.
Nace en un pequeño pueblo campesino, de Armance A. Vignancour y de Alexis-Agustin Peyret, oficial del ejército napoleónico. En 1837 entró en Colegio Real de Pau, un internado regido por una pedagogía rigorista. Con su título de bachiller, marcha París en 1845 a seguir estudios superiores, pero una vez en esa ciudad no quiso saber de l’Ecole Polythecnique ni de otro internado: en compensación por tantos años de encierro, se sumerge en la vida de las librerías y los cafés, devora los periódicos, descubre la literatura y la política, y le anuncia a sus padres que va a estudiar Derecho en el Collège de France.
Los años de su formación intelectual coinciden con los últimos y agitados años de la Restauración. Peyret escucha con devoción a los “afamados maestros” —como Quinet y Michelet— que habían convertido su cátedra en la Sorbona en tribunas donde se predicaba las ideas de la libertad, “de progreso filosófico, de libertad democrática, de mejoramiento de la condición del pueblo, utopías socialistas”, etc. Antes de diplomarse en Ciencias y Letras participa en los acontecimientos de la Revolución de 1848. El Abate Lamennais habría abrazado a Peyret en medio de una manifestación diciéndole: “estrecho entre mis brazos a la juventud de Francia”.
Con el estallido de febrero de 1848 emergieron en todos los barrios de París alrededor de trescientos clubes políticos radicales y socialistas. De aquellos clubes, Peyret estaba particularmente vinculado al Club de la Revolución, de orientación antiblanquista.
El 23 de marzo de 1848, Barbès, Sobrier, Cahaine, Hubert y otros antiguos revolucionarios se dirigieron a todas las sociedades populares de París y la banlieue invitándolas a enviar delegados para constituir un club central, con el fin de garantizar “la unidad de la representación revolucionaria del pueblo” con vistas a las elecciones de la Asamblea Constituyente.
Las sesiones del Club de clubs , de las que participaba Peyret, se informaban en el diario La Commune de Paris que dirigía Joseph Sobrier, uno de los jefes del partido republicano. Peyret fue su secretario. En el periódico, además del joven Peyret, colaboraron figuras como George Sand, Eugène Sue y Esquiros. Subtitulado “Moniteur des Clubs”, el periódico servía de enlace entre los casi 300 clubes republicanos y socialistas que animaron la vida política de aquellos años de efervescencia revolucionaria. Cuando Sobrier fue detenido tras los hechos del 15 de mayo, el joven Peyret, de apenas veintidós años, asumió la dirección del diario hasta su desaparición, el 7 de junio.
El electorado de la convocatoria a la Asamblea Constituyente lo constituirían los pequeños campesinos, a quienes interpelaba el periódico. Peyret, que provenía de la Francia rural, se desempeñó como Secretario del “Comité d’Agriculture et Colonization” del periódico.
Con la represión que se desata contra los “montañeses” a partir de junio de 1849, Sobrier y muchos de sus compañeros son arrestados, mientras que otros se exilian. Peyret retorna a Pau, ciudad cercana a su pueblo natal, desde donde edita dos entregas de L’Almanach Démocratique des Pyrennés (1850, 1851) y lanza su candidatura a diputado para las elecciones que tendrían lugar en 1852. Pero es procesado bajo la acusación de “delito de opinión” y detenido. Fue defendido por el ilustre abogado y tribuno Michel de Bourges.
Tras el autogolpe del presidente Luis Bonaparte del 2/12/1851, Peyret decide emigrar a América del Sur: llega a Montevideo en noviembre de 1852, cuando esta ciudad era un hervidero de ideas liberales, saintsimonianas, fourieristas, blanquistas, carbonarias… Allí se encuentra con otro exiliado francés, el pedagogo Amedée Jacques, con quien colabora. Tras la Batalla de Caseros (1852), Peyret y sus amigos defendieron desde Montevideo la causa de la Confederación Argentina en las páginas de El Comercio del Plata, periódico que había fundado Florencio Varela y que entonces dirige José María Cantilo. Incluso editan un periódico propio, en francés: Le Río de la Plata, fundado por Peyret, que aborda los temas concernientes al nacimiento de la nueva república.
Pero las dificultades económicas lo apremian y su amigo Alberto Larroque le ofrece en 1855 un puesto como profesor de historia, geografía y francés en Colegio de Concepción del Uruguay, instalándose desde entonces en la Pcia. de Entre Ríos. Larroque lo presenta a Justo José de Urquiza, el entonces poderoso Gobernador de la Pcia. Entre Ríos y futuro presidente de la Confederación Argentina. Su estrecho colaborador, Benjamín Victorica, le ofrece ingresar como redactor del diario El Uruguay de esa ciudad. Nace en estos momentos su amistad con Juan María Gutiérrez y a través de este una amistad epistolar con Juan B. Alberdi. Al año siguiente, Peyret se hace cargo de la redacción de El Nacional Argentino, órgano que defendía desde Paraná la causa de la Confederación.
En julio de 1857 el presidente Urquiza le encomienda hacerse cargo de la fundación de una colonia agrícola en la Pcia. de Entre Ríos: la Colonia San José. A pesar de la inexperiencia agrícola de los colonos, de los escasos recursos y de las inclemencias del tiempo, San José se convertirá en poco tiempo, bajo la dirección de Peyret, en un modelo en ensayo colonizador. Se desempeñó en ella durante 18 años como director, administrador, juez de paz, comisario, presidente de la municipalidad y hasta llegó a hacer de oficial del registro del estado civil. Incluso antes de la sanción de un Código Civil, Peyret se basó en el derecho administrativo francés para crear en San José el primer registro civil del país, y el 24 de agosto de 1873 se celebró en la ciudad puerto de Colón, emplazada frente a la colonia, el primer matrimonio civil de la Argentina.
Peyret y los partidarios de San José como una suerte «pequeña república», igualitaria y laica, viven una serie de sucesivos enfrentamientos con el padre Lorenzo Cot y los defensores de la Iglesia Católica al interior de la colonia. Al mismo tiempo que enseña historia en el Colegio de Concepción del Uruguay, funda un organismo anexo de carácter cooperativo, “La Fraternidad”, para sostener a los alumnos de menores recursos económicos; y en 1872 funda en esa ciudad la Biblioteca Popular “El Porvenir”.
En 1870, tras la caída del Imperio, fue convocado por sus viejos compañeros de emigración. Prefiere quedarse en su patria de adopción, aunque envía al gobierno de Adolphe Thiers un “Proyecto de Constitución para la República Francesa”, donde propone —en el país de la centralización del poder— un plan de descentralización federativa, un “resumen de lo que se practica desde hace sesenta años en América bajo el nombre de instituciones libres, de autogobierno”. Peyret, Alfredo Ébelot y otros exiliados en la Argentina lanzan entonces un nuevo periódico: Le Républicain. En 1871 lee intensamente desde San José al anarquista francés Pierre-Joseph Proudhon y en los años siguientes traduce algunos de sus textos sobre el “principio federativo” para la prensa de la confederación (El Uruguay, 1865). Tras la muerte de Proudhon en 1865 publica una serie de artículos sobre su vida y su obra en la Revista Literaria de Montevideo.
Tras el asesinato de Urquiza en abril de 1870, el presidente Sarmiento decreta la intervención de la provincia. Peyret, si condenó el asesinato, se pronunció por la solución federal y contra la intervención central en una serie de cartas que envía al diario La República de Buenos Aires y que luego reune en un volumen: Cartas sobre la intervención del Gobierno Federal a la Provincia de Entre Ríos (1873) que firmó con el seudónimo de “Un Estrangero” (sic). Esta oposición política le costó su puesto en la Colonia San José, debiendo emigrar de la Provincia.
Entre 1874 y 1875, invitado por su amigo Gutiérrez, dicta cátedra de francés en la Universidad de Buenos Aires. En 1876 está otra vez enseñando historia en el Colegio de Concepción del Uruguay, ocasión en que publica su Tratado de Historia Contemporánea. Entre 1878 y 1883 dicta allí mismo la cátedra de Historia de las Instituciones Libres, y desde esa fecha hasta 1890 dictó esa misma materia en el Colegio Nacional de Buenos Aires. Instalado definitivamente en Buenos Aires, durante los diez años que van de 1889 a 1899 se desempeñó como inspector nacional de tierras y colonias, lo que le permitió recorrer e punta a punta el país (entre 1897 y principios de 1899) para escribir su informe en dos volúmenes: Una visita a las Colonias de la República Argentina (1889), continuando en la misma línea de sus Cartas sobre Misiones (1881).
Masón y librepensador, consagró al combate contra la iglesias instituidas muchas de sus energías, en la prensa, en la cátedra y en el libro. En 1885 publicó en la Revista Universitaria de Buenos Aires su obra Los orígenes del cristianismo, y al año siguiente apareció su Historia de las religiones, donde sostiene que “La religión del Cristo debe ser sustituida por la religión de la Humanidad”. Al mismo tiempo se publica con su firma una suerte de almanaque masónico-librepensador, titulado El Pensador Americano, donde postula —siguiendo a Comte— cambiar el calendario basado en el santoral por un “calendario de la humanidad”, con días correspondientes a figuras como Washington, Jefferson, Galileo, Bolívar, Diderot o Fourier. Editó también la revista El Libre pensador, órgano del Club Liberal.
Ayudó a fundar logias masónicas en Entre Ríos y fue activo en la Logia Jorge Washington de Concepción del Uruguay. Además de los periódicos citados, colaboró en El Artesano (1863), La Tribuna Nacional, Le Courrier de la Plata, Diario del Comercio, L’Indépendant (1886), La Agricultura (1894-1902), L’Emigrant, Revue Illustrée du Rio de la Plata (1890-1892), L’Amico del Popolo, etc.
En 1889 volvió a Francia por única vez, para representar al gobierno nacional en la Exposición Universal de Paris, y aprovechó la ocasión para representar a los incipientes grupos socialistas de Buenos Aires en el Congreso Socialista Internacional de Paris, donde quedó fundada la Segunda Internacional. Durante su última década de vida aparece desengañado y distante de la élite dirigente a la que había contribuido a educar y más próximo a posturas abiertamente socialistas.
Murió en Buenos Aires en 1902, a la edad de 76 años. Aunque pasó el último año de su vida postrado, “no hacía otra cosa que leer, estudiar y escribir”. Desde el 26/11/1995 sus cenizas descansan en el cementerio de San José.
Obra
- “Emigration et Colonisation. La Colonie San José”, Concepción del Uruguay, Imprimerie du Journal L’Uruguay, 1860.
- Countes Biarnés, Concepción del Uruguay, 1870 (2ª ed: Paris, Lajouane, 1889).
- Projet de Constitution pour la République Française, Buenos Aires, Imprimerie et Fond. De Types Rue Belgrano 126, 1871, precedida de una carta “A. M. Thiers, Président de la République Française” y un “Preface” con la fundamentación jurídico-política.
- “Algunos aspectos sobre la colonización para la Provincia de Entre Ríos”, Concepción del Uruguay, Imprenta de La Democracia, 1872.
- Cartas sobre la Intervención del Gobierno Federal a la Provincia de Entre Ríos. Por un estranjero, Buenos Aires, Imprenta Litografía y Fundición de Tipos de la Sociedad Anónima, 1873.
- Cartas sobre Misiones, Buenos Aires, Imprenta Nacional, 1881.
- Historia contemporánea, Buenos Aires, Lajouane, 1885.
- El pensador americano, Buenos Aires, s/e, 1886.
- Historia de las religiones, Buenos Aires, Imprenta y Estereotipía de Buffet y Cia., 1886.
- Una visita a las colonias de la República Argentina, Buenos Aires, Imprenta “Tribuna Nacional”, 1889, 2 vols. (ed. francesa: Une visite aux colonies de la République Argentine, Paris, Imprimerie Typographique de P. Mouillot, 1889).
- Conferencias sobre la historia de las instituciones libres, Buenos Aires, Tribuna Nacional, 1883.
- “El Congreso de las sociedades cooperativas de consumo”; “El Congreso de participación en los beneficios”; “Informe sobre el Congreso de la enseñanza técnica, comercial e industrial”, “Congreso sobre ejercicios físicos”, en el volumen colectivo La República Argentina en la Exposición Universal de Paris de 1889. Colección de informes reunidos por el delegado de gobierno D. Santiago Alcorta. Publicación oficial, Paris, Sociedad Anónima de Publicaciones Periódicas [Imprenta P. Monillot], 1890.
- “L’Anniversaire de la Colonie San José” (1878), Buenos Aires, Lajouane, 1907.
- Discursos, Buenos Aires, Lajouane, 1907.
- La evolución del cristianismo, Buenos Aires, La Cultura Argentina, 1917 (prefacio y última parte de Historia de las religiones de 1886).
- De Serres-Castet a Buenos–Aires, Orthez (Francia), Centre Social A. Peyret-Edit. Gascogne, 2002.
- Notes de voyage en Europe. 1889-1891, Pau, Cairn, 2010.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2024), “Peyret, Alexis”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org.