MÜLLER, Enrique Germán (seudónimo: “Compañerito”) (Buenos Aires, Argentina, 1901 – Buenos Aires, Argentina, 26/12/1925).
Dirigente juvenil comunista.
Nace en un hogar proletario y socialista en el barrio porteño de Colegiales, hijo y sobrino, respectivamente, de los inmigrantes alemanes Enrique y Germán Müller, fundadores del Partido Socialista y luego del Partido Socialista Internacional (PSI). Tuvo dos hermanas, María y Margarita, también militantes socialistas y luego comunistas. Su familia se traslada luego al barrio de Chacarita y finalmente a Vicente López, Pcia. de Buenos Aires.
Militante precoz, en 1916 escribe en un periódico escolar. Sus opiniones políticas le valen la descalificación de un profesor, pero el joven apela ante el Consejo Escolar y logra ser aprobado. Afiliado a la Juventud Socialista del barrio porteño de Belgrano en 1915, forma parte del ala izquierda, opuesta la Primera guerra mundial y que adhiere a la Revolución rusa de 1917. Junto con su padre y su tío, apoya a principios de 1918 la creación del Partido Socialista Internacional (PSI), luego Partido Comunista de la Argentina (PC).
El 12 de abril de 1921 está en el Congreso de fundación de la Federación Juvenil Comunista (FJC), en el que Luis Koiffman es elegido secretario general. En 1922 Koiffman lidera la fracción “frentista” del Partido Comunista (partidaria del frente único con el PS). La cuestión del “frente único” divide a la Junta Ejecutiva de la FJC: por un lado una mayoría compuesta por Moisés Kornblit, Bernardo Sierra, José Celano, Francisco Sánchez, Cosme Gjivoje y Nicolás Cretari avala la postura frentista mientras que Enrique Müller, Antonio Cantor y Carmen Alfaya la rechazan en minoría dentro de la FJC, alinéandose con la mayoría del Comité Ejecutivo partidario. La FJC expulsa a los disidentes, al mismo tiempo que el Partido Comunista expulsa a los “frentistas”. Finalmente, con los “frentistas” fuera del partido y de la FJC, Koiffman es depuesto de su cargo de secretario general en mayo de 1922, siendo sucedido de modo interino por Enrique Müller. Lo sucedieron en el cargo por Antonio Cantor (1922-1923) y Orestes Ghioldi (1923-1924). Müller vuelve a ser elegido secretario general de la FJC en 1924, asumiendo poco después como secretario del Secretariado Juvenil Sudamericano de la Internacional Juvenil Comunista (IJC).
Es el director de su órgano, Juventud Comunista (1923-1928). Tiene a su cargo la creación de centros infantiles donde se brinda a los niños recreación y educación, dirigiendo una revista orientada a los niños: Compañerito (1923-1924). Es designado secretario del Secretariado Sudamericano de la ICJ. Participa también del I Congreso de la FJC, reunido en Buenos Aires los días 25 y 26 de enero de 1922 y del II Congreso, reunido en Buenos Aires el 31/7/1923. Está también entre los fundadores de la Federación Obrera deportiva (1924-1927), que impulsaron los comunistas. Cumple con el servicio militar en Tostado (Provincia de Santa Fe), siendo destinado al Estado Mayor porque lee y traduce del alemán en una época de influencia prusiana sobre el Ejército Argentino. Cumplido el servicio militar, ingresa en la Carrera de Odontología de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Trabajaba empleado en un negocio y estaba afiliado a la Federación de Empleados de Comercio.
Asistió como secretario de la FJC a la reunión ampliada del Comité Ejecutivo partidaria presidida por Rodolfo Ghioldi del 27 de junio de 1925 para tratar la “Carta abierta” dirigida al Partido Comunista de la Argentina por la Internacional Comunista a propósito del conflicto surgido con el ala izquierda (los futuros “chispistas”).
Müller se hizo presente desde la barra el día de apertura del convulsionado VIIº congreso del PC argentino reunido en Buenos Aires el 26 de diciembre de 1925, en que se enfrentaron la fracción liderada por José F. Penelón, Rodolfo Ghioldi y Victorio Codovilla con la fracción “chispista”. Los “chispistas” habían sido expulsados previamente, pero de todos modos se hicieron presentes en el Congreso, y en los tumultos provocados por los debates en torno a las credenciales de uno de los delegados, Sebastián Monforte, Müller cayó muerto de dos tiros. Modesto Fernández y Teófilo González, “chispistas”, resultaron heridos de arma blanca. Intervino la policía, deteniendo a los delegados y a la barra (unas 200 personas). La dirección comunista acusó de la muerte de Müller a Modesto Fernández ante la justicia y desde las páginas de su periódico La Internacional: “Modesto Fernández asesinó en forma fría y alevosa a Müller de dos balazos […]. El crimen fue preparado con anticipación y cometido fríamente”.
Los “chispistas” defendieron la inocencia de Fernández desde su periódico. Según La Chispa, la acusación contra Modesto Fernández fue “una confabulación de delatores”, urdida por doce personas que se encontraban en una celda de la Comisaría 18 de la Ciudad de Buenos Aires, que “determinaron llevar a cabo una delación combinada ante la justicia burguesa para inculpar del hecho al compañero Modesto Fernández”. Entre los “complotados”, La Chispa nombra a Miguel Burgas, Salomón Jaselman, Luis Riccardi, Israel Mallo López y Benigno Argüelles.
Las pericias balísticas demostraron que la bala que mató a Müler era de un calibre distinto al de la pistola Browning que portaba el acusado, de modo que Fernández finalmente fue absuelto por la justicia después de pasar cuatro meses en prisión (Malagarriga y Munner, 1929, pp. 160-170). Sin embargo, la historia oficial comunista insistió en denominarlo “agente provocador” y “asesino de Müller”. Al salir de prisión, Fernández declaraba: “Luego de 4 meses y medio, el juez Artemio Moreno acabó de dictar con fecha 8 del corriente auto de libertad definitiva a favor de mi persona, acusado de haber dado de muerte en el Salón Wörwarts el día 26 pasado, mientras se realizaban las sesiones del VII Congreso del PC al que fue mi compañero de ideas Enrique G. Müller” (La Chispa nº 8, 22/5/1926).
Sus restos fueron velados en la casa del PC situada en la calle Estados Unidos 1625 y luego llevados al Cementerio de la Chacarita, donde varios de su camaradas tomaron la palabra. Entre ellos, Arturo Orzábal Quintana en nombre de la Asociación Amigos de Rusia. En 7 de enero de 1926 se le rindió tributo en un acto realizado en Teatro Augusteo y la FJC lanzó ese mismo mes un número especial de Juventud Comunista dedicado a su memoria.
Su hermana Margarita Müller estaba casada con el dirigente comunista Miguel Burgas.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2024), “Müller, Enrique Germán”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org.