DI PASQUALE, Jorge (apodo: Jorgito, Pascualito) (Buenos Aires, 28/12/1930 – detenido-desaparecido en Buenos Aires el 29/12/1976).
Dirigente peronista revolucionario, secretario general del gremio de farmacia.
Dirigente gremial desde la época de la “resistencia peronista”, organizador de la CGT de los Argentinos, activista del Peronismo de Base. Inicia su militancia política de muy joven, poco antes del golpe militar de 1955 que derrocara al gobierno de Juan D. Perón. Durante los primeros años de dura represión al movimiento obrero peronista, participa de los primeros intentos de reagrupar en la clandestinidad al antiguo activismo gremial, como la “CGT Auténtica”. También se lo cuenta entre los impulsores de la Comisión Intersindical, estructura que aglutina a los gremios normalizados desde 1957 y permite dotar de un andamiaje institucional legal al peronismo proscripto, a medida que este movimiento va recuperando sus posiciones en los sindicatos, y viabiliza también la campaña por el voto en blanco en las elecciones para la Convención Constituyente. En 1958 es elegido Secretario General del Sindicato de Empleados Farmacéuticos, al frente del cual renovaría su representación por dieciocho años, desarrollando un estilo sindical propio, generoso y amplio en la concepción de las funciones del representante obrero peronista, alejado del modelo de “jerarca” que se consolidaría poco después. A comienzos de 1959 interviene activamente en la lucha por el frigorífico Lisandro de la Torre, ocupado por sus trabajadores ante su inminente privatización. En 1960 su figura se proyecta sobre las 62 Organizaciones Peronistas, al ser designado su secretario de prensa. Entre 1961 y 1962 ostenta el cargo de Secretario del Consejo Coordinador y Supervisor del peronismo, por lo que visita con frecuencia a Perón en Madrid y es nombrado su delegado personal ante los países socialistas. Viaja como tal a Cuba con Sebastián Borro y Juan Jonch, pasando luego a Egipto, Francia y varios países latinoamericanos. Al menos hasta las elecciones de 1962, la “línea dura” del sindicalismo a la que pertenece mantiene cierta cuota de poder en espacios del movimiento que luego serían hegemonizados por el metalúrgico Augusto T. Vandor y sus seguidores. Di Pasquale llega incluso a ser diputado nacional electo en 1962, aunque no puede ejercer ese cargo al ser anuladas las elecciones que determinaron junto al rotundo triunfo peronista en las urnas, la caída del gobierno de Frondizi. Los “duros” quedan progresivamente marginados de un movimiento sindical que tiene a Vandor como figura dominante y que va constituyéndose como “factor de poder” a la par que aumenta su integración al sistema institucional, prebendas para la cúpula, exclusión y persecución para el activismo opositor, y desmoralización de las masas por las derrotas previas. En 1964 dirige la Confederación de Agrupaciones Peroinstas Ortodoxas, de escasa repercusión. Integra la comisión para la difusión de la encíclica papal Populorum Progressio que preside el obispo de Avellaneda Monseñor Jerónimo Podestá desde 1967. De entonces data el inicio de un vínculo político que devendrá en fuerte amistad con el Mayor Alberte, a la sazón delegado personal de Perón y secretario general del movimiento peronista. En una trayectoria similar a la seguida por Gustavo Rearte, Di Pasquale es de los pocos dirigentes gremiales que evoluciona hacia el peronismo revolucionario bajo la influencia de John W. Cooke, asumiendo la necesidad de una vanguardia armada. Desde marzo de 1968 impulsa con Raimundo Ongaro la formación de la CGT de los Argentinos, ocupando la secretaría adjunta de la central. Junto a aquél viaja por todo el país en un llamado a la unidad combativa contra la dictadura del Gral. Onganía instaurada con el golpe del 28 de junio de 1966. En agosto de 1968 participa de la organización del Primer Congreso clandestino de la que comienza a llamarse “Tendencia Revolucionaria”, junto con Rearte, Cooke y el Mayor Alberte, estando presente también en el plenario de la misma tendencia en Córdoba, enero de 1969, que expresa su solidaridad con los presos de las Fuerzas Armadas Peronistas (FAP) caídos en Tucumán mientras preparaban un foco guerrillero. En ambos cónclaves distintos grupos del peronismo debaten la cuestión de la lucha armada. A los pocos días del secuestro del Gral. Aramburu por la nueva guerrilla peronista de Montoneros, Di Pasquale es detenido e interrogado por los servicios de inteligencia.
Durante el gobierno militar del Gral. Lanusse, es enviado a la cárcel, procesado, una vez más entre otras, por “instigación a la rebelión y al crimen”. Al igual que Rearte, mantiene en 1972 una posición minoritaria en la izquierda peronista frente al retorno del peronismo al gobierno, al rechazar la candidatura de Héctor J. Cámpora e insistir en la postulación de Perón junto a mayores definiciones políticas de éste. Tal posición es arrasada por la elección de Cámpora como cabeza de fórmula del FREJULI en el Congreso del Partido Justicialista del 15 de diciembre de 1972. La posición de Di Pasquale la comparten Ongaro, el PB, la dirección de FAP. Es el Peronismo de Base (PB) la corriente a la que adhiere e impulsa en los primeros años de la década de 1970. Ésta aglutina hacia 1973-1974 a sectores de las FAP y otros no alineados en el movimiento peronista oficial, que cuestionan la derechización y el sesgo represivo del proceso político tras el desplazamiento de Héctor J. Cámpora del gobierno, en pos de la unidad del campo revolucionario popular. Enraizado su pensamiento en una militancia sindical y política de casi veinte años, Di Pasquale defiende una posición clasista, unitaria, entendida como la identidad propia de los trabajadores forjada al calor de su experiencia y sus luchas, entre las que las de los años de la Resistencia guardan un sentido fundante. En su plataforma política de esos años el PB impulsa el trabajo en frentes gremiales, sosteniendo en las fábricas la conformación de “Agrupaciones Obreras Peronistas”, concebidas como organismos que serían el núcleo de una organización revolucionaria y donde se plantea la práctica de la solidaridad y la democracia obreras, el control de la producción por los trabajadores, la independencia respecto de las comisiones internas, la acción directa. En esos años PB alcanza cierta presencia en medios gremiales como el de textiles, telefónicos, gráficos, navales de zona norte, metarlúrgicos del oeste, alimentación, así como en las luchas obreras de La Plata que se dan en las plantas de Propulsora, Petroquímica Mosconi, UTA y Peugeot. La lejanía de toda esta corriente respecto del rumbo del gobierno peronista se expresa en la organización de un acto independiente de las FAP-PB a fines de abril de 1974, en oposición a la convocatoria oficial para el acto del 1º de Mayo, bajo la consigna “nada para festejar”, en el que hablan a modo de cierre Ongaro y Di Pasquale levantando la consigna de la Alternativa Independiente con el objetivo de forzar una ruptura entre la clase trabajadora y el gobierno de Perón. A mediados de 1974 éste se halla en un proceso de conversaciones con Raimundo Villaflor, el diputado Rodolfo Ortega Peña y Eduardo L. Duhalde con el objetivo de crear un agrupamiento político único entre éstos, FAP-PB, Alicia Eguren, y otros grupos y militantes, como “Peronismo de los Trabajadores”, intento abortado por el asesinato de Ortega Peña el 31 de julio de 1974. Viéndose amenazado él también por las Tres A, sale del país hacia Venezuela, permaneciendo en la Universidad de Trabajadores de América Latina de San Antonio de los Saltos. Pero no soporta el exilio y la distancia de sus compañeros.
Retorna al país en 1976, y a fines de ese mismo año, el mismo día de su cumpleaños, es secuestrado por un “grupo de tareas” del Ejército argentino en casa de la calle Condarco 1734. Fue sometido a torturas en un centro clandestino de detención, según unas fuentes el centro clandestino de detención “El Vesubio”, según otros en el “Proto Banco”. Según el testimonio de un ex detenido, Di Pasquale se esforzaba por mantener el ánimo de los otros presos, a pesar de la certeza de que iban a morir.
En diciembre de 2009, después de 33 años, el Equipo Argentino de Antropología Forense identificó sus restos en el Cementerio Municipal de Avellaneda. Según un informe de dicho equipo, el cadáver presentaba lesiones de “impacto de –al menos tres—proyectiles de arma de fuego que afectaron cráneo, hombro y pelvis”. Los restos fueron velados el 28 de diciembre de 2009 en el Sindicato de Farmacia, Rincón 1044 y llevados al día siguiente al Cementerio de la Chacarita.
Casado con Griselda Román, un hijo: Pedro Fernando.
Cómo citar esta entrada: Tarcus, Horacio (2021), “Di Pasquale, Jorge”, en Diccionario biográfico de las izquierdas latinoamericanas. Disponible en https://diccionario.cedinci.org